Presos políticos golpeados y aislados en Ramo Verde. Trescientas muertes violentas en 25 días de julio.
Ramírez pospuso reunión con la banca internacional. Las ganancias de Citgo caen 63% en primer trimestre de 2014. Pdvsa analiza venta de Citgo “para protegerse”. Empresas de militares, recién constituidas, recibieron 23,5 millones de dólares de Cadivi. Magistrada Zuleta disiente de decisión del TSJ que rechaza demanda de diputados para obligar a publicar lista de empresas con dólares de Cadivi. Contralora pidió paciencia en caso “empresas de maletín”. Más venezolanos compran “fiao”. Crece 90% el uso de tarjetas de crédito para pagar alimentos. En clínicas y farmacias, el aumento en el uso del plástico es de 59%. Empresas temen más impuestos en entorno de estancamiento. Vence plazo para firmar contratos del sector público. Protestas laborales en Guayana, suscitan violentas declaraciones de Cabello. Subieron a 86 las personas contagiadas con chikungunya. Presidente Maduro anuncia que el Ejecutivo “realiza operaciones de carácter financiero, que se anunciarán en los próximos días, para fortalecer las reservas internacionales y la capacidad de inversión” y dice que hay dólares. Mientras tanto, Gobierno agregó más trabas para otorgar dólares vía Sicad II. En riesgo producción de harina precocida de maíz. Advierten cierre técnico de servicios para pesquisa de cáncer. Falla 60% de insumos. Ramírez reconoce fallas en el sector no petrolero.
Congreso escenográfico
Muy poco conectado con la situación que presenta la sintomatología antes esbozada, se celebró un Congreso ritual, formal, escenográfico. Un acto administrativo. Lograrlo ha sido un triunfo para Nicolás Maduro. Lo mismo la victoria, no obstante su regusto pírrico, al obtener que Holanda le entregara al general Carvajal, presentado al evento como héroe nacional de alguna gesta no especificada.
¿Cuál será el precio de ambos triunfos? Está por verse. El que pagará el Presidente y, mucho más importante, desde luego, el que pagará el país.
La vida de la Unidad
Comprenderá el lector que para este columnista, constituyan tema particularmente difícil de abordar, los acontecimientos de la MUD esta semana. De la reunión del equipo permanente ampliado declaró el mismo lunes 28, el secretario ejecutivo adjunto Cristóbal Fernández Daló: quedó expresamente manifestada por todos la voluntad unitaria y se avanzó en acuerdos estratégicos básicos, pero quedan diversos asuntos importantes por definir, en el plano político, organizativo y operativo.
Por supuesto que no voy a analizar la decisión de separarme de la secretaría ejecutiva, lo cual otros vienen haciendo con mucha pertinencia. Oí agudos comentarios de Colette Capriles y Ángel Alvarez con César Miguel Rondón y Ángel Alayón y Willie Mckay con Ramón Pasquier.
Creo que lo pertinente es transcribirles la carta que dirigí el miércoles 30 a los partidos integrantes de esta alianza que es un activo de la democracia venezolana:
“En los últimos meses, una campaña artera y sañuda se ha desarrollado contra la Unidad y su instrumento, la Mesa de la Unidad Democrática, y se ha escogido a fin de golpearla, disparar contra la credibilidad de su vocero y servidor. Empezó en los laboratorios del poder arrogante, pero no se quedó allí, la insensatez lo acogió con lascivia (…)
Las políticas están sometidas al análisis y la crítica, por formación democrática y espíritu académico lo sé. Otra cosa es la mentira calculadamente sembrada en una sociedad angustiada y polarizada. Ni una sola de esas calumnias he respondido ni responderé. Figurar entre los blancos predilectos de los extremismos, sencillamente, honra. Pero no es mi papel ser el centro de una polémica entre nosotros. El éxito de la tarea que pueda cumplir desde la función encomendada, se basa en la confianza. No estoy aquí como obstáculo para nadie. Mi trabajo no es ganar discusiones, sino ayudar a generar consensos. Y la situación del país es tan grave que se nos exige máxima eficiencia en aquello que se espera de nosotros. Así que precisamente por compromiso con la Unidad, para cuidarla mejor como el logro que es, en las actuales circunstancias, creo que lo procedente es hacerme a un lado. Sin romper, desde luego, los lazos que a este proyecto me unen, porque son irrompibles.
No quiero que mi nombre y la polémica que pueda suscitar, sigan siendo excusa para que se dispare por mampuesto a la Unidad. No me voy de la Unidad, solamente cambio mi puesto de lucha (…) Dejo de ser el primero y paso a ser el último de la fila. Para servir a Venezuela, para ser útil a la Unidad, importa lo que uno haga y no la posición que uno ocupe.
Libre del compromiso de la coordinación, rescato mi derecho a la opinión y al aporte personales.
Ofrezco mi colaboración a todo aquel partido o compañero que la necesite para mejor cumplir los fines comunes, y a la Unidad en su conjunto. Pueden contar conmigo.
Es mi modo de agradecerles.
Como ciudadano que defiende la libertad, seguiré luchando porque no se olvide a nuestros presos y exilados.
Me concentraré principalmente en la tarea de políticas públicas, de apoyo a las gestiones regionales, locales y parlamentarias, a la difusión de los logros de la Unidad, y a la promoción del diálogo entre venezolanos, porque el modelo basado en la imposición ha colapsado, y el diálogo nos hace falta hoy, y más falta nos hará mañana.
Muchas gracias por todo.
Amigo,
Ramón Guillermo Aveledo