Luis Suárez sonrió y desestimó cualquier preocupación sobre rodilla izquierda recién operada. El delantero uruguayo aseguró que «está en perfectas condiciones» el lunes, la víspera del decisivo partido contra Italia que la Celeste debe ganar para clasificarse a los octavos de final de la Copa del Mundo.
El atacante del Liverpool se sometió a una cirugía de meniscos días antes del torneo, y no pudo actuar en el debut de Uruguay, una derrota 3-1 ante Costa Rica. Tuvo un regreso épico al marcar los dos goles en la victoria 2-1 sobre Inglaterra, que ya está eliminada.
El máximo goleador de la liga Premier dijo que está recuperado para enfrentar a Italia en la ciudad costera de Natal, donde se espera calor y humedad bajo el sol del mediodía, pues el encuentro arranca a la una de la tarde.
«La rodilla está espectacular», dijo Suárez.
«Luego de la tensión y el esfuerzo del otro día la recuperación fue muy buena», afirmó ‘el pistolero’, que calificó el partido contra Italia como una final. «De no haber sido así se lo habría dicho al técnico»
El juego contra Inglaterra fue el primero que disputó el artillero uruguayo en más de un mes.
Los charrúas, semifinalistas en Sudáfrica 2010, están obligados a ganar para avanzar a la segunda fase por el Grupo D. A Italia le basta con el empate.
«Era probable que en el partido alguna jugada no le saliera como lo pensase por el poco rodaje que tuvo en las últimas semanas», valoró el técnico uruguayo Oscar Tabárez. «Pero confiaba en lo que él sabe hacer en el último cuarto de cancha. Eso ya lo sabe y lo tiene».
Un Suárez en forma le da a Uruguay una envidiable pareja de ataque junto a Edinson Cavani, uno de los principales cañoneros de la liga francesa la última campaña con el Paris Saint-Germain.
«Su pareja de ataque es una de las más fuertes en la Copa del Mundo», admitió el técnico italiano Cesare Prandelli. «Los dos son delanteros modernos con sentido de gol que no conceden puntos de referencia a los defensores. Vamos a tener que contenerlos».
Cavani convirtió un penal contra Costa Rica, pero el ataque celeste lució manso durante largos tramos de ese partido ante la ausencia de Suárez.
Tabárez se negó a revelar su alineación, aunque dio a entender que no va a hacer ningún cambio con respecto al equipo que derrotó a Inglaterra.
Esa alineación no incluía al capitán Diego Lugano, que se perdió el cotejo por una lesión en la rodilla izquierda.
Uruguay recibió críticas por mantener en el campo a Álvaro Pereira contra Inglaterra después de que recibió un fuerte golpe en la cabeza a los 61 minutos.
Pereira contó que estuvo brevemente inconsciente y luego se sintió mareado tras el golpe, pero le permitieron regresar al campo. El sindicato de jugadores, FIFPro, después criticó a la FIFA por no proteger a Pereira.
El organismo rector del fútbol mundial contestó que a Pereira se le permitió regresar al terreno después de que un examen neurológico del equipo médico de Uruguay «mostró claramente que era normal» su situación.
«A Italia le tengo respeto y admiración, he trabajado ahí», dijo el maestro Tabárez, quien dirigió brevemente al Milan y el Cagliari en la década de 1990.
«Jugar con Italia es un regalo del cielo. Si ganamos, sería una victoria sobre uno de los grandes, esa es la gran motivación», aseguró Tabárez. «Tenemos respeto, pero también las mismas posibilidades».