César Hernández fue adquirido por Cardenales de Lara la semana anterior en un cambio múltiple que envió a Luis Jiménez y Mario Martínez a Bravos de Margarita.
El polivalente pelotero asegura que quiere estar desde el primer día con el uniforme de los pájaros rojos, aunque adelanta que es temprano para hablar de fechas.
Hernández, quien puede defender todas las posiciones del infield, además de custodiar los jardines con solvencia, fue notificado de la transacción el sábado al finalizar la práctica de bateo en el Citizens Bank Park.
“La primera persona a la que le comenté del cambio fue a (Luis) Valbuena. Ese día jugamos contra los Cachorros. Luis no me creía la noticia y fue al día siguiente que me dio la bienvenida. Fue bueno que uno de los referentes como Valbuena me hiciera sentir que era bienvenido. No esperaba la noticia, me cayó un poco de sorpresa pero es una decisión que tomaron los Bravos y debo respetar”, dijo al departamento de prensa de Cardenales.
Otro que recurrentemente le jugaba bromas con la posibilidad de estar en Cardenales era César Jiménez, su compañero de organización en el norte.
“Desde el año pasado Jiménez comentaba que me iban a llevar para Barquisimeto. Siempre lo decía. Pero también fue sorprendido con la noticia”, rememora el utility.
“Voy a estar más cerca de casa. Tanto Jiménez como Valbuena me hablan de una sola cosa y es jugar y llegar lo más lejos posible en la postemporada. Es muy temprano para hablar de cuando me incorporaré pero mi objetivo es jugar desde el primer día de la campaña. Quiero agradar a la afición y no defraudar a la gerencia del equipo”, asegura el joven aragüeño, quien llega para darle un nuevo aire al equipo junto al barquisimetano Carlos Rivero.
“Ir a un equipo vía cambio por (Luis) Jiménez genera un poquito de presión, no lo voy a negar. Sin embargo, confío en mi trabajo y en mis nuevos compañeros. Voy a dar el máximo para conseguir los resultados que todos esperan”.