La noche del domingo, a eso de las 7 pm, Frangerlis de 15 años de edad, salió de la casa de la abuela en la avenida 4, frente a la hostería ubicada en el valle de Quíbor, en el municipio Jiménez. Acompañada de una amiga, de la misma edad, abordaron un servicio de mototaxis con destino desconocido.
En la avenida 13, cuando pasaban por una reconocida cadena de farmacia ubicada en esa localidad, dos sujetos a bordo de una moto interceptaron a las jóvenes y al dueño del servicio. Intentaron despojarlos del vehículo, pero sin mediar palabras.
Se escucharon dos disparos, el primero no impactó a nadie, pero el segundo, hirió a Frangerlis quien era la última de la moto. El impacto perforó su espalda, y salió por el frente de su cuerpo, alojándose posteriormente en su amiga.
Ambas cayeron al suelo, mientras que el mototaxis y los victimarios se daban a la fuga, en diferentes direcciones.
Colmenárez agonizó en el sitio y murió minutos después, mientras que su amiga, fue llevada de emergencia al Hospital Baudilio Lara, y remitida a la sala de Emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda a las 9 de la noche del mismo día, donde permanece en estado delicado.
Mientras tanto, en el sitio, efectivos de la subdelegación de Quíbor, del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, se acercaron al sitio donde yacía la joven asesinada. Trascendió que la adolescente, acababa de cumplir sus 15 años el pasado 26 de mayo y, además, había suspendido sus estudios en el liceo Pastor Cortez Vásquez, cuando cursaba el primer año de bachillerato debido a que salió embarazada. Frangerlis era madre de una pequeña niña luego de dar a luz hace 8 meses, ahora la pequeña quedará bajo custodia de su abuela materna.
Familiares de la occisa arribaron ayer en la mañana a la morgue del Hcamp, donde esperaron por el cuerpo de la menor asesinada.
“No pedimos justicia porque en este país hay que ser actriz o alguien famoso para que agarren a los culpables”, dijeron sus familiares al ser abordados por los periodistas de la fuente sucesos.
Caso Santana
La madre de Luis Alejandro Valenzuela Santana, de 17 años de edad, asesinado el domingo en la madrugada, acudió a la morgue del Hospital Central para recoger los restos de su hijo.
Lilian Beatriz Valenzuela Santana, expresó su “profundo dolor” por la muerte de su hijo, el segundo de tres, a quien describió como un buen estudiante y que no tenía problemas con nadie. Además, Valenzuela, desmintió la versión de algunos medios de comunicación locales, que habían informado que el joven occiso tenía tres hermanos en prisión.
“Solo tengo tres hijos, uno mayor quien está aquí conmigo, a quien me mataron y una niña de meses”, explicó la afectada.
Como se recordará, Luis Alejandro fue asesinado por múltiples impactos en la cabeza con una pesada piedra, en el barrio Negro Primero.