Una mañana emotiva se vivió este sábado en la Clínica Razetti, donde familiares y amigos rindieron homenaje a Conchita Celli de Finizola, develando una fotografía que engalanará la galería de honor de este reconocido centro médico.
Rememorar a la dueña de un legado familiar basado en principios y valores como la justicia y la paz, siempre será grato.
Es por ello que en el acto de ayer, sobraron las palabras de afecto y los buenos recuerdos.
El doctor Bartolomé Finizola Celli fue uno de los encargados de conversar sobre la historia de su madre en la Clínica Razetti.
Es por ello que consideró pertinente tomar apreciaciones de la misma Conchita Celli de Finizola, en relación a la familia razettiana que ha puesto en marcha la clínica tras la idea de jóvenes profesionales que, hace cinco décadas, quisieron brindarle a los larenses una alternativa en materia de salud.
El médico cardiólogo Bartolomé Finizola Celli, aprovechó la ocasión para mostrar un material audiovisual en el que integrantes de la familia razettiana, ofrecieron palabras del trabajo que realizara Conchita Celli en vida. Como una sabia consejera la describió el doctor Jaime De Lima, quien aseguró que desde el principio apoyó todas las actividades relacionadas con la fundación de la Clínica Razetti y su posterior puesta en marcha.
Por su parte, la doctora Ana Cecilia Miliani también figura en el video donde aseguró: “Conchita nos dio muchísimo ánimo. Sentíamos un importante apoyo desde el punto de vista moral”, dijo refiriéndose a la luchadora mujer que durante los primeros 45 años de la Razetti se vinculó con el desarrollo de dicha institución.
“Mamá nos hablaba de la importancia del trabajo hecho con fe y seguridad. Mamá citaba una frase de Antonio Castillo Lara que decía: Dejar de luchar es comenzar a morir”, recordó el doctor Bartolomé Finizola Celli en el cálido encuentro de ayer. El amor a Dios y a la vida, permitieron que Conchita Celli de Finizola, emitiera siempre frases que dejaban una enseñanza para quienes tuvieron la dicha de estar cerca de ella.
Una serie de fotografías que reflejaron la vida y obra de la homenajeada, dieron cierre al encuentro en el que resumieron el legado de Celli de Finizola como “trabajo, constancia, fe y verdad”.