El Cardenalito del Este nuevamente se convirtió en escenario de una protesta estudiantil ayer martes que fue reprimida por efectivos del Cuerpo de Policía del estado Lara con perdigones y metras lanzadas con fondas, refriega que dejó saldo de al menos siete jóvenes heridos y una decena de retenidos, quedando finalmente entre estos tres detenidos en la 14 Brigada de Infantería Mecanizada.
La manifestación esta vez fue en estricto rechazo a la quema, destrucción y saqueo de varias áreas de la Universidad Fermín Toro, tales como el cafetín, la biblioteca, uno de los laboratorios de computación y del departamento de caja por parte de motorizados armados quienes irrumpieron violentamente a esta institución la noche del lunes y ocasionaron el siniestro que obligó a las autoridades a suspender las actividades hasta nuevo aviso, situación que afecta el normal desarrollo académico de los alumnos por el retraso que esto les causa para la culminación de sus respectivas carreras, años y semestres en curso.
Estos hechos, tipificados como delitos en el Código Penal venezolano, demandan de la sociedad civil y de la comunidad estudiantil larense la ubicación y posterior privativa de libertad para los responsables, en cuyo logro debe trabajar el Ministerio Público en coordinación con los órganos de investigación.
La Policía ataca
El numeroso grupo de estudiantes universitarios, a quienes se les unieron liceístas, a eso de las 10:00 de la mañana dieron su apoyo en una concentración a la Universidad Fermín Toro, frente a su sede de El Ujano, y al mediodía se trasladaron hasta El Cardenalito del Este donde permanecieron hasta altas horas de la noche.
Inusual para los estudiantes resultó que en lugar de la sistemática represión de la Guardia Nacional, desde que comenzaron las protestas el 12 de febrero de este año, en esta oportunidad recibieron el ataque del equipo antimotín de PoliLara.
Fue así que a las 2:15 de la tarde los funcionarios hicieron la primera arremetida y descargaron lluvias de perdigones contra ellos.
Una nueva arma insidiosa, capaz de matar a una persona, utilizaron los efectivos de la policía uniformada.
Se trató de las llamadas fondas, con las cuales lanzaron metras, impactando una de estas en el pecho a un estudiante, quien malherido y con la respiración trancada fue llevado en peso por sus compañeros y atendido por personal médico en un punto logístico en Los Cardones, recuperándose tiempo después producto de la herida causada.
Este hecho replegó a los estudiantes, quienes a las 3:45 recibieron un nuevo ataque de los antimotines, durante el cual se escucharon dos detonaciones de proyectiles con un arma automática, aparentemente accionada por los funcionarios, plomos que no dieron en la humanidad de ninguna persona.
Esto motivó a la búsqueda de refugio de los muchachos que por momentos se retiraron del lugar y se colocaron cerca de los edificios de Los Cardones, pero al volver, a las 4:57, fueron recibidos otra vez con disparos por los policías, al igual que a las 4:08, hora cuando el joven fue herido con la metra en el pecho y otro en el pie izquierdo por este mismo tipo de objeto, ambos socorridos de inmediato, mientras los uniformados seguían disparando sin cesar.
Disparan en el parque
Un estudiante, quien ocultó su identidad, indicó que observó cómo policías desde las motos disparaban contra personas que conversaban en el Parque El Cardenalito del Este, sin estar participando en las protestas.
Condenó esta acción de la Policía de Lara. “En lugar de defendernos arremete contra nosotros”.
“Es bueno que se vayan cayendo las caretas”, dijo, en alusión al gobernador Henri Falcón, en su carácter de comandante del Cuerpo de Policía del estado Lara, a quien emplazó, además, a que exprese “si tiene pensado saltar la talanquera”.
En este sentido, el estudiante adelantó que visto el modo como ahora son reprimidos por la Policía de Lara, en las próximas horas tienen en sus planes dirigirse a la Gobernación y concentrarse frente a este organismo, a objeto de que Falcón los atienda y explique porqué les envió a la Policía para que los atacara con perdigones y metras, por el solo hecho de manifestar pacíficamente contra los daños en perjuicio de la Universidad Fermín Toro.