Su antecesor Alex Ferguson estuvo 27 años en el cargo, y él ni siquiera una temporada: el escocés David Moyes fue destituido este lunes como entrenador del Manchester United y el jugador Ryan Giggs asumirá las riendas en el próximo partido.
«Manchester United anuncia que David Moyes ha dejado el club», afirmó el club en un comunicado.
«Ryan Giggs, el jugador más laureado del club, asumirá la responsabilidad del primer equipo hasta que pueda realizarse un nombramiento permanente», afirmó el club en su página web.
Moyes tomó un equipo campeón y lo deja situado en la séptima plaza, sin opciones de clasificarse entre los cuatro primeros para jugar la Champions League la próxima temporada.
El Manchester United fue derrotado once veces esta temporada y eliminado en cuartos de final de la Liga de Campeones.
David William Moyes, que el 25 de abril cumplirá 51 años, había entrenado antes al Preston North End (1998-2002) y al Everton (2002-2013), tras una modesta carrera como defensa central coronada con el título de campeón de Escocia con el Celtic Glasgow.
Una trayectoria muy similar a la de Ferguson, que, sin embargo, se despidió del Manchester con dos Champions League, 12 ligas y 5 copas, entre otros títulos.
La elección de Moyes se interpretó como un intento de reproducir la apuesta de Ferguson y se daba por descontado que el club sería paciente.
Sin embargo, los tiempos han cambiado desde que en 1986 Sir Alex llegó al club del norte de Inglaterra.
Entonces era un club de valor modesto en horas bajas y hoy es una marca de éxito, dominada por la familia estadounidense Glazer -sus accionistas mayoritarios-, que cotiza en la bolsa de Nueva York y necesita estar en la Champions para mantener el ritmo de venta de mercadotecnia y por los ingresos directos que genera.
Precisamente, las acciones del club subieron casi un dolar en Wall Street(de 17,72 a 18,6) a las dos horas de abrir la jornada.
Los compañeros de Moyes reaccionaron con más gravedad.
«No es nada nuevo. En los últimos 10, 15 años, si pierdes en un gran club te vas a la calle», dijo el entrenador del Bayern de Munich, Pep Guardiola.
La destitución de Moyes «me ha sorprendido un poco, porque el Manchester United no tenía esta costumbre», afirmó el técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti.
Una letanía de errore
Moyes llegó a un club campeón pero con mucha necesidad de reforzar una defensa envejecida y un medio campo falto de jugadores creativos -lo más imaginativo que tenía el equipo era el voluntarioso, pero atolondrado japonés Shinji Kagawa-.
Pero los fichajes de relumbre no llegaron. Cesc Fábregas (FC Barcelona), Ánder Herrera (Athletic Bilbao), Mesut Ozil (Arsenal) o Leighton Baines (Everton) se quedaron en sus clubes o se fueron a rivales.
A última hora, el Manchester United se hizo con los servicios del rocoso jugador belga Marouane Fellaini, del Everton, por el que pagó una fortuna: 27,5 millones de libras (46 millones de dólares, 33,5 millones de euros), más de lo que marcaba su cláusula de rescisión.
La torpeza de los fichajes fue rápidamente atribuida a la inexperiencia de Moyes en el manejo de grandes presupuestos.
En el mercado de invierno el club intentó una operación desesperada y trajo del Chelsea al español Juan Mata, por 37 millones de libras, un récord en su historia (62 millones de dólares, 45 millones de euros). Pero su aportación no cambió la mala estrella de un equipo que se ha visto muy afectado por las lesiones de sus dos delanteros estrella, Wayne Rooney y Robbie Van Persie, que apenas han coincidido en el terreno.
Derrotar al Manchester United se volvió demasiado fácil con Moyes. Equipos que no se acordaban de la última vez que habían ganado en Old Trafford rompieron la maldición, como el Newcastle (0-1, primera victoria en 35 años) o el Everton (0-1, primera victoria en 21).
Entre los nombres que han surgido para reemplazar a Moyes la temporada que viene figuran el argentino Diego Simeone (Atlético de Madrid), el holandés Louis van Gaal (Holanda), el alemán Jürgen Klopp (Borussia Dortmund), el español Roberto Mártinez (Everton), el propio Giggs y… Alex Ferguson, a quien podrían interrumpirle a sus 72 años su merecida jubilación.
La llegada de cualquiera de los cuatro primeros rompería con la tradición de los entrenadores británicos del United. La única vez que el Manchester United estuvo dirigido por un extranjero fue cuando el irlandés Frank O’Farrell estuvo al frente durante una temporada y media, a principios de los años 70.