España negocia la venta de nuevo material militar a Venezuela tras finalizar la construcción de ocho buques de vigilancia, dijo el miércoles el ministro de Defensa, Pedro Morenés, que calificó al presidente venezolano Hugo Chávez de «gran amigo».
Morenés informó en el Parlamento que una delegación de los astilleros públicos Navantia, que diseñan y fabrican barcos militares y sistemas de control y combate, se encuentra estos días en Caracas para presentar sus nuevos productos al gobierno de Chávez.
El ministro de Defensa confirmó que cualquier material que se venda no incluirá tecnología de Estados Unidos. En 2005, Washington denegó la licencia de varias piezas fabricadas por sus empresas para unos aviones que el anterior gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero tenía previsto entregar a Venezuela.
En ese sentido, precisó que tan respetable es el veto de Estados Unidos como la decisión soberana de España de impulsar acuerdos comerciales con un aliado como Venezuela.
Venezuela no es precisamente muy amigo de los Estados Unidos y cuyo presidente (Chávez), por cierto, insulta un día sí y otro no al presidente de Estados Unidos, que es un gran amigo nuestro, como también lo es el presidente de Venezuela», dijo Morenés en el Congreso en respuesta a una pregunta sobre los planes de futuro de su departamento.
«Respetemos la soberanía de los demás si queremos que se respete la nuestra», agregó.
En 2005, España firmó un convenio con Venezuela para la construcción de ocho buques militares, cuatro patrulleros oceánicos y otros cuatro de vigilancia litoral. El último de ellos, construidos por Navantia y la estatal venezolana Diques y Astilleros Nacionales, se entregó el pasado 23 de abril.
Las relaciones entre España y Venezuela pasaron por muchos altibajos en los últimos años, pero en general se mantuvieron estables en el plano económico.
Los altercados diplomáticos más significativos fueron el ya emblemático «¿Por qué no te callas?» que el rey Juan Carlos espetó a Chávez en 2007. En 2010, la investigación judicial que denunció supuestos vínculos entre el grupo armado vasco ETA, la guerrilla colombiana de las FARC y el gobierno de Venezuela provocó una escalada de tensión diplomática entre los dos países.
De momento, no se conoce diálogo público o privado entre Chávez y el nuevo mandatario conservador español Mariano Rajoy, muy crítico con Venezuela en su etapa en la oposición.