La Juventud Demócrata Cristiana, integrante del partido Copei, manifestó su apoyo irrestricto a las acciones de protesta emprendidas por el movimiento estudiantil en todo el país, al tiempo que deploró la represión por parte de los cuerpos de seguridad del estado a los manifestantes.
“Queremos expresarle a los jóvenes universitarios que tienen todo el apoyo de Copei. Todas las actividades que ellos tengan a bien programar, contarán con el apoyo irrestricto de la tolda socialcristiana”, aseguró Julio Rondón, presidente de la Juventud Demócrata Cristiana del municipio Iribarren.
Asimismo, manifestó su “profunda preocupación por los hechos violentos que se han suscitado en la última semana. Rechazamos todo tipo de violencia, venga de donde venga”.
“Vemos como la crisis política e institucional ha colapsado todos los sectores sociales del país. Las justas protestas de nuestro pueblo están siendo reprimidas de una manera aberrante y dantesca por los cuerpos de seguridad, sin demostrar el más mínimo respeto por el derecho a la vida ni por la dignidad del ser humano”, subrayó Rondón.
“El Gobierno nacional no puede esperar que el pueblo le aplauda, por cuanto es culpable de la crisis política, económica y social que mantiene a los ciudadanos agobiados, sin poder conseguir ni siquiera que comer”.
El dirigente juvenil señaló que “hoy nos enfrentamos a un sistema opresor totalitario, donde la crítica es criminalizada, las cárceles se llenan de presos políticos, las ollas de los venezolanos están vacías, el hampa gobierna las calles con total impunidad y la moneda nacional se devalúa a cada instante.
Es por ello que los jóvenes estamos llamados a la tarea de luchar por una democracia verdadera, humanista, solidaria y participativa”.
Rondón solicitó, en nombre de la Juventud Copeyana, “el cese inmediato de las agresiones tanto de los colectivos armados como de los cuerpos de seguridad del Estado, que lejos de cumplir su función como protectores de la ciudadanía, se han dedicado a reprimir con brutalidad”.
Asimismo, hizo un llamado al diálogo “sincero, honesto y sin hipocresías. Es fácil decirlo, pero muy difícil aplicarlo cuando el Gobierno quebranta todas las leyes y normas, olvidando que su mandato es pasajero, por cuanto el pueblo es quien quita y pone a los mandatarios. Seguiremos en la calle hasta que se cumplan nuestras exigencias, el que se rinde pierde”.
