El gobernador de Lara, Henri Falcón, ofreció una rueda de prensa en la Plaza Macario Yépez, en respuesta a los señalamientos que hiciera el presidente Nicolás Maduro en cadena nacional.
Los alcaldes de Iribarren y Palavecino, Alfredo Ramos y José Barreas, también asistieron junto al coordinador de la Unidad, Macario González.
Henri Falcón declaró que el país está al borde de un estallido social. “No puede seguir persistiendo la negación de lo que ocurre en Venezuela”.
Rechazó “la postura hostil” del presidente Nicolás Maduro contra los gobernadores opositores de Lara, Miranda y Amazonas. “Procuró malponernos a través de amenazas y chantajes (…) Creemos en la reconciliación pero no aceptamos chantajes de nadie. El Gobierno trata de imponer la puya de la amenaza”.
Falcón anunció que asistirán al Consejo Federal de Gobierno, la próxima semana. “Vamos a reclamar los recursos que nos corresponden por derecho (…) Debemos avanzar sin sectarismos ni odios (…) Abonemos el camino hacia el diálogo real e inteligente; Venezuela lo reclama”.
No a la violencia
El mandatario regional dijo que su objetivo es garantizar la paz a quienes lo siguen o lo adversan. A la par, se deslindó de cualquier acción violenta ocurrida durante las manifestaciones opositoras, que se desataron el 12 de febrero. “Aquí no prevalecerá la violencia”, acotó.
Acusó a los colectivos armados, asociados con el oficialismo, de desatar el caos en las protestas.
“Los estudiantes pacíficamente han demostrado su condición democrática”.
Por otra parte, Falcón denunció que grupos de motorizados tenían planeado arremeter con la sede del partidoAvanzada Progresista e inculpar a los universitarios.
Sobre la represión de colectivos armados en residencias del este y oeste de Barquisimeto, el 19 de febrero en la noche, señaló que también es responsabilidad de los cuerpos policiales del Estado detener a los implicados.
Informó que la Policía del estado Lara tiene la obligación de resguardar la integridad de los habitantes y el funcionario que incurra en actos de represión, será puesto a la orden del Ministerio Público.
Añadió que “la furia de la gente es contenida por los estudiantes” y que las protestas son producto de la crisis social y económica del país “ante las políticas erráticas y la improvisación del Ejecutivo Nacional”.
“Queremos que la voz de los estudiantes sea escuchada en Miraflores (…) Señor Presidente, es su oportunidad de reivindicarse con la historia”, reiteró el gobernador.
Reafirmó que apoya la lucha pacífica en las calles y aseguró que “el Gobierno debe solucionar los problemas de los venezolanos”.
Indicó que respalda a Leopoldo López y su familia ante la privativa de libertad al líder político.
“Exijo un juicio legal y objetivo. Y exhorto para que liberen a los estudiantes detenidos en Fuerte Terepaima, donde hay hasta menores de edad”.
El pueblo reclama justicia
Los alcaldes Ramos y Barreras agregaron que las protestas son justas y legítimas. Solicitaron el cese del ensañamiento y criminalización de esas manifestaciones.
“Los estudiantes han jugado un papel de vanguardia. Y ningún Gobierno los ha podido doblegar”, precisó Ramos.
“No dejen que el odio, la ira y la desesperación guíen sus acciones. Disparar a otro es un acto de soberana estupidez”, refirió Barreras.
El alcalde de Iribarren notificó que asistirán el sábado 22 de febrero a Caracas, en respaldo a la concentración convocada por la oposición. Denunció que el Gobierno “tiene suspendidas las garantías en la práctica”.
