Es lamentable y triste la opinión ofrecida por la defensora del Pueblo Gabriela Ramírez, en el programa del periodista Carlos Croes, cuando se pronunció en contra de la medida humanitaria solicitada por la defensa de Iván Simonovis.
Dicho pronunciamiento fue realizado por la presidenta de la Fundación por los Derechos y Equidad Ciudadana (Fundeci), Elenis Rodríguez, quien opinó que Ramírez quiso hacer ver que si se otorgaba una medida de libertad extraordinaria al ex comisario, se estaría perpetrando un estado de impunidad.
«Déjeme informarle ciudadana Ramírez que al comisario Simonovis se le están violando dos derechos fundamentales consagrados en el Código Orgánico Procesal Penal, el primer derecho violado consiste en el beneficio por el cumplimiento de la pena y el segundo derecho violado es la medida humanitaria», sentenció.
La jurista sugiere a la defensora que busque a un abogado especialista en derecho penal, para que interprete objetivamente lo establecido en el artículo 491 del COPP.
«Este artículo establece que procede la libertad condicional en caso de que el penado padezca una enfermedad grave o en fase terminal, previo diagnóstico de un o una especialista, debidamente certificado por el médico forense o médica forense», sostuvo.
Rodríguez recordó que en el año 2011, el comisario Simonovis por certificación de un médico forense adscrito a la Coordinación Nacional de Ciencias Forenses de Caracas-Bello Monte, estableció que tiene 19 patologías.
«Actualmente tiene una osteoporosis muy avanzada y por no tener el cuido y tratamiento oportuno y adecuado, se ha deteriorado y descalcificado sus huesos. Estuvo a punto de morir en julio de 2013 con una peritonitis y, el 27 de enero 2014 estuvo a punto de una obstrucción intestinal derivado de una enterocolitis aguda, tiene hígado graso y riñones afectados. El ensañamiento y la injusticia del Gobierno, están llevando al comisario Simonovis, lentamente, a la fase terminal, a lo que se refiere el artículo en cuestión», precisó.
Criticó que Ramírez se autodefiniera como defensora de derechos humanos, ya que hasta los momentos ha trabajado como una activista política.
«Un activista de DDHH no insta al pueblo a la lucha de clases como lo hizo usted Gabriela Ramírez al decir que al luchar por la libertad del comisario Simonovis se silencia a las víctimas del 11 de abril de 2002. Una activista de DDHH le exige a un juez que cumpla con la Constitución y las leyes», dijo.
Finalmente la presidenta de Fundeci precisó que «como venezolana y activista de DDHH le exijo que renuncie a su cargo y se dedique a la política pero, desde el PSUV, no desde la institución que fue creada para la promoción, defensa y vigilancia de los derechos y garantías establecidos en la Constitución y en los instrumentos internacionales sobre derechos humanos».
