Las semifinales del Abierto de Australia vivirán el clásico entre el suizo Roger Federer (N.6) y el español Rafael Nadal (N.1), tras sus respectivas victorias ante el británico Andy Murray (N.4) y el búlgaro Grigor Dimitrov (N.22), este miércoles en Melbourne.
En categoría femenina saltó la gran sorpresa con la derrota de la bielorrusa Victoria Azarenka, número dos mundial y vencedora de las dos últimas dos ediciones del Abierto de Australia, ante la polaca Agnieszka Radwanska (N.5) por 6-1, 5-7 y 6-0.
Las semifinales de Melbourne acogerán un duelo entre dos viejos conocidos, Nadal y Federer, que jugarán por 11ª vez en un Grand Slam para un total de 33 enfrentamientos.
El suizo, en un partido muy completo, ganó a Murray en cuatro sets por 6-3, 6-4, 6-7 (6/8) y 6-3.
«Andy me presionó mucho, pero no pudo acabarlo. En comparación con mis mejores años no sé, pero mi confianza es mucho mayor que el año pasado», dijo Federer.
Tras un nefasto 2013, su peor temporada en una década, el número seis mundial jugó con gran seguridad y demostró que todavía se puede contar con él para la victoria en los grandes torneos.
Será la 11ª participación consecutiva del legendario suizo en las semifinales del torneo australiano, en el que se ha proclamado vencedor en cuatro ocasiones (2004, 2006, 2007 y 2010).
Nadal, por su parte, jugará su cuarta semifinal en Melbourne, donde ganó el título en 2009, tras vencer en un partido que dominó el búlgaro Dimitrov.
El mallorquín, con grandes ampollas en la mano izquierda, venció por 3-6, 7-6 (7/3), 7-6 (9/7) y 6-2. Tras caer en la primera manga, mejoró en la segunda y estuvo cerca de volver a perder en la tercera, pero ganó en el tiebreak.
Pero Dimitrov, de 22 años y al que comparan con Federer, fue víctima de su inexperiencia y dejó escapar tres bolas de set.
«Tuve mucha suerte», reconoció Nadal tras la victoria, que cometió muchas faltas directas y errores cruciales durante el partido.
El tenista español está jugando en Australia lastrado por las grandes ampollas que sufre en su mano izquierda, que le obligan a jugar vendado con la consiguiente pérdida de ‘feeling’ con la bola.
«Mi mano no me molesta en el golpe de derecha, pero sí un poco en el servicio. Con la venda tengo la impresión de que voy a tirar la raqueta cuando saco», reflexionó Nadal.
«Pienso que no jugué mal, pero mi gran problema es el servicio porque influye en el resto de mi juego. Tengo que mejorar en dos días porque sino no tendré ninguna posibilidad de alcanzar la final», añadió.
La otra semifinal la disputarán el suizo Stanislas Wawrinka, que el martes dio la gran sorpresa del torneo al eliminar al serbio Novak Djokovic -vencedor en Melbourne los tres últimos años-, y el checo Thomas Berdych, que derrotó con autoridad al español Ferrer.
En categoría femenina Azarenka no pudo con Radwanska, que rompió la racha de 18 victorias consecutivas en Melbourne de la bielorrusa.
«En el primer y en el tercer set cometí demasiados errores, sobre todo en los momentos importantes. Ella está muy fuerte en el ‘passing’, hoy lo demostró en cada bola», dijo Azarenka.
En el otro partido de cuartos de final la eslovaca Dominika Cibulkova (N.20) eliminó a la rumana Simona Halep (N.11) al vencer con autoridad en dos mangas por 6-3 y 6-0.
El jueves se disputarán las semifinales femeninas; Cibulkova contra Radwanska y la sorprendente canadiense de 19 años Eugenie Bouchard (N.30) ante la china Li Na (N.4).
Finalmente la 11ª jornada en Melbourne se cerrará con la primera semifinal masculina, el duelo entre los ‘tapados’ Berdych (N.7) Y Wawrinka (N.8).