En la mañana de este 14 de enero, un residente del barrio José Félix Ribas, en la parroquia Juan de Villegas, al oeste de la ciudad, se encontraba en un terreno que divide ese sector con Cerritos Blancos, lugar que frecuenta para deshacerse de desechos sólidos, cuando observó lo que parecía ser los restos de un cuerpo humano tirado entre los matorrales.
Al acercarse, pudo constatar que su temor se hizo realidad. De inmediato, vecinos de dicha zona llamaron a las autoridades para que acudieran al sitio. Mientras que, pobladores del lugar, se acercaron para ver de quién se trataba.
Al sitio llegó una mujer joven (sin identificar), quien reconoció al que en vida era su esposo, identidad que certificó cuando efectivos de la Policía Nacional Bolivariana le mostraron la cédula del sujeto.
El occiso quedó identificado con el nombre de Miguel Ángel González, de 23 años de edad, residente del barrio Cerritos Blancos, quien habría sido visto por última vez el pasado viernes, cuando a las 8 de la noche salió de su residencia con un amigo y nunca más regresó. Su esposa indicó que, quien buscó a su compañero el fin de semana, tenía poco tiempo en el sector y su esposo no lo conocía muy bien.
Se supo que González, quien presentaba signos de descomposición y fuertes quemaduras por la exposición solar que recibió durante los días que permaneció en su lecho de muerte, dejó a su acompañante embarazada con pocos meses de gestación.
Por su parte, trascendió que, el occiso, en la actualidad no tenía ocupación ni profesión, y presentaba registros policiales del 2009 por posesión de drogas. De manera extraoficial, se supo que hace año y medio recibió el beneficio de la libertad mientras estuvo recluido en la Comunidad Penitenciaria David Viloria, antigua cárcel de Uribana.
Extrañas circunstancias
Al lugar acudió el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, quienes levantaron las pesquisas del lugar de los hechos y realizaron las experticias correspondientes para determinar las responsabilidades del caso.
En las primeras labores de inteligencia, se destaca que la víctima no fue despojado de sus pertenencias, y fue hallado semidesnudo.
