Este domingo su eminencia el Cardenal Jorge Urosa Savino, ofició una misa en la Catedral de Caracas, donde pidió a todos los sectores del país, luchar de manera conjunta para combatir la inseguridad y la violencia que perturba a los venezolanos.
«Por la paz de Venezuela, por la paz de Caracas, para que cese la violencia asesina», fueron las palabras con las cuales el también arzobispo de Caracas inició la liturgia en la que también pidió reflexión.
Cabe destacar que además de los feligreses, también asistieron miembros del cuerpo diplomático acreditado en el país y algunos representantes de la Conferencia Episcopal Venezolana, quienes el pasado viernes finalizaron su centésima primera asamblea ordinaria.
El cardenal Jorge Urosa Savino hizo votos por la consolidación de la paz en el país y que el sosiego recaiga sobre todos.
«Por la paz de Venezuela, por la paz de Caracas para que cese la violencia. Te lo pedimos, señor», fueron las palabras claves las cuales repitió en varias oportunidades.
Por otra parte, el purpurado anunció con mucho júbilo y alegría en el transcurso de la misa, la designación por parte del papa Francisco de monseñor Pietro Parolín como cardenal.
Cabe destacar que Pietro Parolín es un prelado italiano, que fue designado secretario de Estado de la Santa Sede por el papa Francisco el 15 de octubre de 2013, en reemplazo de Tarcisio Bertone y fue Nuncio Apostólico en Venezuela durante varios años.
También el obispo auxiliar de Caracas y secretario General de la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor Jesús González de Zárate, tomó la palabra durante el oficio religioso, asegurando que la falta de fraternidad entre los pueblos y los hombres produce la pobreza, por lo que exhortó a todos los venezolanos a unirse, sin importar religión, raza o tendencia política.
«La fraternidad es el fin de la guerra», dijo al pedir a los venezolanos seguir los preceptos del Papa Francisco de «desarmar a los pueblos para lograr la paz».
Para González Zárate es urgente construir el diálogo, para así consolidar las bases que permitan la reconciliación de todos los venezolanos que desde hace varios años se encuentran desunidos.
«La primera necesidad de nuestra patria es encontrarnos en el diálogo y la fraternidad, hay que buscar la tolerancia entre todos para poder lograr la paz que merecemos», sentenció.
Finalmente el cardenal y el obispo pidieron a Dios que ilumine a todos los venezolanos y no permita el incremento de las victimas por el grave flagelo de la inseguridad.