El próximo 7 de enero se cumplirá la tradicional bajada de la virgen Divina Pastora de su nicho en la iglesia del pueblo de Santa Rosa, en el estado Lara, para su visita número 158 a Barquisimeto, informó el párroco de este templo, Rafael Chávez.
Indicó que a partir de ese día “los devotos de la virgen podrán contemplar la imagen sagrada en los pasillos de la iglesia”, luego de dejar su nicho, situado en la parte más alta de la iglesia de este poblado, ubicado en la intercomunal Barquisimeto-Cabudare.
Los feligreses podrán ir a ver de cerca esta advocación de la Virgen María. Podrán tocar su trono, rezarle y llevar ofrendas.
Entre estas últimas destacan alimentos, especialmente no perecederos, también ropa en buen estado, artículos de aseo personal y otros enseres, para ser distribuidos por la iglesia entre las personas de menos recursos de comunidades de Santa Rosa y sus inmediaciones.
El padre Chávez acotó que pocos días más tarde se dará a conocer el vestido que llevará este año la Divina Pastora, donado por las servidoras de la parroquia El Salvador de Barquisimeto.
Entre estas mujeres sobresale Marrielta Gutiérrez, diseñadora del vestido, así como Carmen Urdaneta, María de Ramírez, María de los Ángeles Díaz, Wilerma Román, Olga González, Fanny Márquez, Yenny Márquez, Oriana Hernández, Maglitza Gutiérrez, Gesmar Cañizo y Magdalena Landaeta. Esta última feligresa se encargó de bordar la prenda de vestir.
La diseñadora del atuendo describió la realización del arreglo de la Divina Pastora como “una experiencia maravillosa porque se trata de la Virgen. Jamás pensamos que podíamos hacer el vestido de nuestra patrona espiritual”.
La procesión de la virgen Divina Pastora es la manifestación religiosa más multitudinaria de Venezuela y una de las más grandes de América Latina, junto a las actividades que en honor a la virgen de Guadalupe se realizan en México.
Se trata de un peregrinaje de más de 2.000.000 de personas que se efectúa de la iglesia del pueblo de Santa Rosa, hasta la catedral de la capital larense.
Este trayecto, que lo transita la virgen sobre los hombros de su pueblo, se inicia cerca del mediodía de cada 14 de enero y culmina a primeras horas de la noche en la Catedral de Barquisimeto.
El peregrinaje es acompañado por cantos, alabanzas y plegarias por parte de los feligreses. Muchos cumplen promesas vestidos de pastores y nazarenos. Algunos caminan descalzos, mientras otros lo hacen hasta de rodillas.