Una fuerte ventisca que se prolongó por poco más de tres minutos causó estragos en diversos sectores de Veragacha, al este de la zona metropolitana de Barquisimeto.
Más de 20 casas quedaron sin techos, seis árboles cayeron sobre viviendas y las líneas eléctricas cayeron al suelo en algunos lugares. Unas 70 casas y 140 familias fueron afectadas. Funcionarios del Cuerpo de Bomberos de Iribarren y de Protección Civil Lara, acudieron al sitio para atender la emergencia y levantar un informe de la situación.
Los vecinos de sector comentaron que pasadas las 4:30 de la tarde comenzó a llover y con el pasar de los minutos fue aumentando la intensidad. En menos de 15 minutos el aguacero era tan fuerte que comenzó a granizar. Los lugareños se asombraron con el fenómeno, pero luego quedaron aterrados cuando una corriente huracanada empezó a llevarse todo a su paso.
“Eso fue muy feo, primera vez en 42 años que llevo viviendo por aquí que veo algo así. Comenzó una brisa fuerte, luego se escuchó un rugido duro y después comenzaron a desprenderse los techos, algunos salían volando por el aire”.
Patiño dice que fueron poco más de tres minutos en los cuales vivieron horas de terror porque en segundos tomó suficiente fuerza para sacar de raíz árboles frondosos y estrellarlos contra las humildes viviendas que hay en la comunidad.
“No sé qué pasó, eso fue de repente, todo estaba tranquilo cuando de pronto, el tiempo se puso implacable y nos castigó, menos mal que muchas de las casas afectadas estaban deshabitadas, por eso creo que no hubo lesionados o fallecidos”.
La casa de Eucaris Hernández, quien tiene ocho meses de embarazo y un hijo de 4 años, fue la primera en el sector en quedar sin techo. Ella acababa de salir junto con su hijo a visitar parientes. “Menos mal que no estábamos ahí, porque de lo contrario quién sabe qué hubiese pasado”, comentó.
“Necesitamos una casa digna, que los entes gubernamentales nos ayuden; quedamos en la calle”.
Crístofer Ochoa, quien vive a pocos metros de Eucaris también quedó sin techo, él junto a Domingo Piña, trató de ayudar a Eucaris, pero éste se apoyó en una reja que estaba electrificada por la caída del tendido eléctrico y sufrió una descarga. Logró soltarse, pero luego debieron trasladarlo a un centro médico, porque padeció de un fuerte dolor en cabeza, brazos y piernas, además de vómitos. Al cierre de esta edición se desconocía su estado de salud.
En el sector San Isidro, parte baja, se observaban árboles caídos encima de la casas y tendidos eléctricos en el suelo, pero las casas no presentaron mayores daños. “El árbol cayó encima de mi casa, arruinó un poco el techo, pero gracia a Dios no hubo lesionados”, comentó Elías Mendoza, miembro del consejo comunal Veragacha.
En Guacabra, al norte de Veragacha, resultaron afectadas unas 30 viviendas y cinco de ellas fueron derribadas por la ventisca.
“Estamos esperando respuesta de Alfredo Ramos y Henri Falcón, que vengan a auxiliarnos, les hemos pedido ayuda, pero nunca nos dan respuesta, que consoliden los servicios”, comentó Beila Pinzón.