Una inusual imagen para esta época del año mostró el principal centro de comercio de la ciudad: la avenida 20. Ayer, desde temprano en la mañana, decenas de consumidores caminaban de arriba a abajo por esta avenida comprando los últimos artículos para completar las tradiciones y costumbres de la época decembrina.
Sin embargo, pese a la cantidad de personas, la afluencia no se asemejaba a los años anteriores, según la versión de los propios comerciantes ubicados en la zona.
Ana Luisa Pineda y Ernesto Escobar, son comerciantes ubicados en el centro comercial socialista Bequito, en la calle 28; Escobar, quien ayudaba a montar toda la mercancía en el stand, expresó que la actividad ha mejorado en los últimos días, sin embargo, «no es mejor que en años anteriores».
Quienes indican recaudar entre 3 mil a 4 mil bolívares diarios durante los últimos días, advirtieron que la mejoría de las actividades comerciales mientras se acerca la nochebuena «es algo normal», pero presumen que las «personas tienen menos dinero en el bolsillo», explicando la diferencia entre años previos a este.
De igual forma, Miguel José Rodríguez, responsable de una tienda que comercializa con zapatos, indicó la mejora de las ventas en los últimos días, pero, como condición generalizada, las ventas han estado por debajo de lo registrado en la misma fecha en 2012, «hemos podido mejorar los números en comparación a los días anteriores, pero no se compara a los años pasados».
La tendencia parecía ser general, comerciantes que intervinieron en las entrevistas realizadas ayer indicaron que durante este último mes, el movimiento no había sido tal a como el registrado, inclusive, en noviembre de este año. Dentro de las hipótesis manejadas por quienes se dedican a la actividad comercial, el hecho de las fiscalizaciones hechas por el Indepabis durante el mes pasado,que redundó en la baja de los precios de varios artículos y la compra compulsiva de muchos consumidores, así como la situación económica actual del país, han sido los causantes del reflejo de la situación peculiar presentada durante diciembre de 2013. Sumado a ello, algunos comercios han reducido su jornada laboral, y por ende lo que perciben por concepto de ventas, para cumplir con las disposiciones legales sobre los días libres semanales que deben tener los trabajadores contemplado en la ley orgánica que los ampara.
«Provoca cerrar las santamarías e irse del país».
Los comerciantes de la avenida 20, dicen sentirse «agobiados» por el Estado venezolano, a través de los organismos que se encargan de controlar la actividad.
«El último trimestre, las fiscalizaciones hechas por el Indepabis han aumentado», explica, «además, al igual que en años pasados, el Seniat visita a cada comercio para chequear que estemos al día con el pago de los impuestos», continúa, «nos sentimos agobiados, con ganas de cerrar las santamarías e irnos del país».
La terrible oración pertenece a uno de los comerciantes que no quiso ser identificado por el temor que infringe una posible retaliación.
Sin embargo, al igual que el anónimo, todos los entrevistados indicaron que, durante todo el año la actividad de este organismo estadal no ha cesado en contra de los comerciantes, «aunque se ha agudizado durante los últimos meses». Todos los entrevistados indicaron que sortearon con éxito dichas inspecciones, aunque semanalmente reciben visita de personas ligadas a los consejos comunales que han sido adiestrados para llevar adelante estos procedimientos.
Despejarán avenida
Sobre los comerciantes informales que se mantienen apostados en las aceras de la avenida 20, se conoció que el pasado viernes se sostuvo una reunión entre dichos comerciantes junto al representante de la Guardia Nacional Bolivariana, ubicada en la carrera 19 con calle 28, y donde se acordó que, después del 31 de este mes, todos los trabajadores del sector informal de la economía despejarán la avenida. «Conocemos la medida y la acataremos», indicaron los comerciantes consultados.
Por su parte, los comerciantes formales esperan que, luego del despeje de la avenida, no se repita lo ocurrido en ocasiones previas, cuando quienes se dedican a la economía informal regresaron y colmaron las aceras de este centro concurrido.
