La noche del pasado jueves feligreses barquisimetanos se dieron cita en la iglesia Nuestra Señora del Rosario de Fátima, en la urbanización Barici, para disfrutar un año más del concierto profondos que ofrece la agrupación crepuscular Santoral.
Junto al párroco de la iglesia Jesús Genaro “Chulalo” Pérez, los talentosos músicos hicieron un paseo por temas de su autoría y otros tantos clásicos de la cultura festiva venezolana.
La gaita Sin Rencor, del Gran Coquivacoa, fue la pieza con la cual inició este espectáculo. En la voz de “Chulalo” los presentes corearon e invitaron a amarse unos a otros y vivir en armonía.
“El amor universal, sin importar hacia quién” dijeron en reiteradas ocasiones tanto los músicos como el padre que sería la invitación de esta noche en la cual las familias barquisimetanas se dieron cita para compartir de este enérgica y hermosa presentación.
Con un popurrí de aguinaldos venezolanos como Corre caballito y A ti te cantamos los músicos continuaron el espectáculo en el cual también recordaron sus inicios de la mano del cantautor Virgilio Arrieta, de quien interpretaron la famosa pieza Quién como yo.
Chulalo comentó que sobraban razones para celebrar esta noche. Entre estas por el Papa Francisco (latino) quien “invitó a alabar a Dios con alegría” y el aniversario 21º de la agrupación Santoral, junto a quienes los presentes le cantaron al amor en todas sus expresiones.
Esta noche David Araujo, junto a los hermanos Jorge y Luis Pernía, unieron sus voces a la del carismático párroco para presentar un repertorio alegre y reflexivo, una hermosa fiesta de Navidad.
Me gusta Elena de Raimundo Pacheco y Amor verdadero de Willie Colón fueron otros de los temas interpretados en esta noche de reflexiones en la cual invitaron a los presentes a construir un mejor país a través del respeto, a trabajar por esa Venezuela que los niños de hoy necesitan para su mañana.
Con la despedida del año nuevo y la bienvenida de una nueva etapa los músicos también interpretaron letras como Haremos promesas y la famosa Tamborera del talentoso marabino Huáscar Barradas.
Entre palos y alegrías, “de esas gaitas que se llevan en el ADN”, fue otra de las gaitas interpretadas esta noche de fiesta navideña.
El encuentro que para este año arribó a su cuarta edición, culminó con una pequeña muestra de los temas emblemáticos de la agrupación, que esa noche presentó un repertorio navideño tradicional.
En esta ocasión no se trató de una misa-concierto, sino de un espectáculo musical apoyado y también organizado por el padre Jesús Genaro.