Cada vez que llueve fuerte en la zona alta del municipio Morán crece la preocupación entre los agricultores que se encuentran en las inmediaciones del río Tocuyo ya que, debido a la falta de una necesaria canalización, sus aguas se salen de su cauce e inundan sus siembras.
Los más afectados son los cañicultores, muchos de los cuales ya han sufrido pérdidas millonarias por ese motivo.
Jorge Saldivia, presidente de la Sociedad de Cañicultores del Occidente de Lara, (Socadol), declaró que, sólo en el municipio Morán, desde la presa Dos Cerritos, la extensión recorrida por el río, hasta las inmediaciones del caserío Maraca, está cercana a los 50 kilómetros.
Pero también antes de caer al embalse el río Tocuyo carece de canalización y de igual manera se sale de su cauce inundando las siembras en sus inmediaciones.
Saldivia afirmó que llevan años exigiendo la canalización de esa corriente de agua pero hasta ahora el Ministerio del Ambiente no ha decidido nada al respecto.
Dijo que los cañicultores son los más afectados por el problema y muchos de ellos, durante desbordamientos del río, han perdido hectáreas de caña de azúcar arrastradas por la fuerte corriente que, además, deja el terreno en muy malas condiciones por lo que resulta dificultoso y hasta imposible volver a sembrar.
Se refirió a la zona de Boro, al noreste de El Tocuyo, donde prácticamente el río no tiene por dónde correr pues el canal se encuentra completamente obstruido por la maleza, árboles o bambúes, además de que en algunos sitios se han registrado derrumbes de sus orillas recortando aún más el espacio para que las aguas circulen libremente hacia abajo.
Incluso, dijo que el puente de Boro está en peligro pues en algunas oportunidades han sido de tal magnitud las crecidas que las aguas le han pasado por encima.
“Eso se debe a que no tiene por donde cruzar entre tanto monte y el agua busca sitio por donde hacerlo, saliéndose de su cauce normal”, expresó.
Lo mismo ha ocurrido con otros puentes ubicados a todo lo largo del río, tanto entre Humocaro y la represa de Dos Cerritos como los ubicados entre el embalse, el caserío Maraca y los existentes en la ruta hacia el municipio Torres.
En la exigencia de la canalización le apoyó Edgar Contreras, también directivo de Socadol y conocedor del problema que confrontan sus colegas cañicultores del municipio Morán.
“No sólo están en peligro las haciendas de caña y otros rubros ubicados en las cercanías del río sino también varios caseríos cercanos, como Maraca, cuyos habitantes ya han pasado sustos por esa causa”, indicó.
“Son varios los caseríos que se encuentran en condiciones de peligro por lo que sus habitantes se han unido a los agricultores, en especial los cañicultores, exigiendo del gobierno nacional tomar medidas antes de que se vean arrasados por alguna de las crecidas de la importante corriente.
Insistió en la necesidad de que el Ministerio del Ambiente disponga de los recursos necesarios para que, lo más pronto posible, se elabore el proyecto de canalización del río Tocuyo antes de que vaya a provocar un desastre en algunos de sus poblados cercanos, incluyendo la población de Río Tocuyo, en este caso en el municipio Torres, que se encuentra a poca distancia de sus riberas.
“Son muchos los cañicultores y también dueños de fincas de hortalizas preocupados por esa amenaza permanente que el gobierno se niega a aceptar haciéndose de la vista gorda”, precisó el dirigente agrícola de municipio Morán.
Calificó de seria la situación por cuanto en varios sectores de El Tocuyo, obligado por las obstrucciones que encuentra en su canal original, abre otros en medio de los cañamerales o siembras de tomate, pimentón, papa, cebolla u otros rubros agrícolas que se producen en toda la jurisdicción.
Puntualizó que los afectados no son solamente los cañicultores grandes sino también los pequeños que se sienten amenazados por el principal río de la región larense.
Fotos: Luis Salazar