Los docentes, padres, representantes y alumnos de la unidad educativa Antonio Fonseca Betancourt, de El Eneal, se cansaron de la indiferencia como los dirigentes del ministerio del Ambiente en Lara han tratado el grave problema de contaminación ambiental que vienen padeciendo desde hace algún tiempo y salieron a protestar cerrando la vía.
La comunidad educativa ha venido denunciando desde hace varios días la situación, considerada grave por las autoridades sanitarias al punto de que la doctora María Isabel Castro, jefe del municipio sanitario número 6, recomendó la suspensión temporal de clases en vista del riesgo de enfermedades infectocontagiosas que confrontan.
“El problema no es de Hidrolara, el único organismo que se ha hecho presente; sino del ministerio del Ambiente, pues el problema se origina en la laguna de oxidación, que está colapsada”, explicó la profesora Sandra Contreras, directora.
Dijo que han acudido a Hidrolara, Ambiente y Corpolara en busca de solución pero no han logrado nada.
“Las aguas negras continúan invadiendo todo el liceo y no se preocupan por eso”, agregó.
Baltazar Amaro, luchador social y docente en otra institución, abogó por sus colegas del Fonseca Betancourt, algunos de los cuales ya presentan consecuencias de la contaminación, como escoriaciones en los brazos.
“Igual acontece con los estudiantes que se enferman con frecuencia por la misma causa y en el ministerio del Ambiente no se preocupan por hacer algo por esa laguna de oxidación”, puntualizó.
Indira León, del concejo comunal y Angie Rivero, representante, dijeron que varios alumnos se han enfermado con hepatitis, amibiasis, dengue y otras enfermedades a causa de las aguas servidas que brotan por las alcantarillas.
“El problema es la laguna de oxidación que no tiene el debido mantenimiento por parte del ministerio del Ambiente”, enfatizó León.
Carlos Giménez, representante de Fenatev en Duaca, denunció el riesgo que corren los docentes de la institución por el ambiente en el que están laborando.
Este miércoles, cansados de la indiferencia por parte del ministerio del Ambiente, decidieron salir a protestar en la calle y a las diez colocaron obstáculos en las afueras de El Eneal, vía a Duaca, impidiendo el tránsito automotor en ambos sentidos.
Allí se mantuvieron hasta horas de la tarde, esperando la llegada de algún funcionario de ese organismo para plantearle directamente el caso, pero nadie llegó.
Dijeron estar dispuestos a cerrar la vía diariamente hasta recibir alguna información o indicio de que se hará algo para que la laguna sea recuperada, no sólo para beneficio del centro educativo sino de toda la población, afectada desde hace tiempo por los malos olores, en especial en determinadas horas cuando se hacen más insoportables y se presume provocan más enfermedades infectocontagiosas.