Pasaron cuatro días en huelga de hambre pero ayer decidieron autoflagelarse los reclusos de la Estación Policial Unión, ubicada en Barrio Unión, para exigir diversas peticiones y ser escuchados.
Desde el calabozo, los 25 reos, gritaban “queremos traslados para los penales, necesitamos más tiempo y días de visitas y mejores condiciones para pagar nuestras condenas”.
A las 9:45 a.m de ayer, fueron saliendo en grupos de cinco, esposados, los privados de libertad con sus piernas llenas de sangre por las heridas que se causaron. Fueron trasladados hasta el Hospital Central Universitario Antonio María Pineda en patrullas.
Uno de los reos, a bordo de la unidad manifestó: “Estoy penado por nueve años y cuatro meses y ya llevo tres años instalado en esta comisaría”.
Otros de los reclusos indicó que están cansados de los retardos procesales y que cada vez que llegan a los tribunales les suspenden la audiencia por cualquier motivo sin justificación alguna.
Exigieron también tener más visitas y no sólo los días domingo; y ahora más, que están en temporada de Navidad y quieren compartir con sus familiares, hijos y seres queridos. Un total de 16 reclusos fueron trasladados al área de emergencia del Hospital para que fueran atendidos.