Un avión de pasajeros ruso se estrelló el domingo en la noche cuando intentaba aterrizar en la ciudad de Kazán, lo que derivó en la muerte de las 50 personas que iban a bordo, dijeron las autoridades.
El Boeing 737 de la compañía Tatarstan Airlines se estrelló a las 7:20 pm. No se informó inmediatamente cuáles fueron las causas del accidente.
Según reportes, la aeronave pareció perder altura al efectuar un segundo intento de aterrizaje, luego de lo cual se estrelló e incendió. Los 44 pasajeros y seis tripulantes que transportaba perdieron la vida, dijo Irina Rossius, portavoz del Ministerio de Emergencias.
Kazán se encuentra a 720 kilómetros (450 millas) al este de Moscú, desde donde partió el vuelo. Se reportó que caía una lluvia ligera sobre la ciudad, con vientos de unos ocho metros por segundo (18 millas por hora).
Rusia ha sufrido una serie de accidentes aéreos letales en los últimos años. Algunos de ellos se debieron al uso de aeronaves viejas, según mencionan los expertos, pero también denuncian otros problemas, como entrenamiento deficiente de la tripulación, aeropuertos en mal estado, controles gubernamentales laxos y negligencia generalizada de la seguridad con tal de obtener ganancias.
El accidente de aviación más reciente en el país ocurrió en enero, cuando un Tupolev de fabricación rusa perteneciente a la aerolínea Red Wings se salió de la pista en el aeropuerto Vnukovo de Moscú, siguió por un campo nevado y chocó contra un talud de una carretera cercana, partiéndose en pedazos e incendiándose. Los investigadores dicen que una falla en el equipo provocó el percance, en el que murieron cinco personas.