Desde horas de la mañana de ayer, el Órgano Superior para la Defensa de la Economía Popular visitó varias tiendas en el centro de la ciudad de Barquisimeto.
Los ciudadanos, al notar que estaban inspeccionando y fiscalizando, empezaron a rondar los locales. De inmediato comenzaron a generar largas colas.
Luego del mediodía las personas se encontraban malhumoradas porque tardaban mucho en las colas y observaban que los primeros que adquirían los productos con las rebajas eran los mismos trabajadores, militares y familiares.
Esa situación hizo que más de uno que estaba en la cola se enojara y empezaran las discusión en pleno bulevar de la 20.
Debido a esa situación, se creó un fuerte rumor de saqueo, el cual se extendió a lo largo y ancho de toda la avenida 20.
La tensión se incrementó, los comerciantes de los diversos locales sintieron temor y decidieron, en su mayoría, bajar las santamarías de sus negocios para reguardarse tanto ellos como la mercancía.
En pocos minutos las tiendas y centros comerciales estaban completamente cerrados. Barquicenter bajó sus santamarías a las 2:00 de la tarde, pues a las afueras hubo varias discusiones y problemas, y los ciudadanos se estaban resguardando dentro de las instalaciones, otros al parecer, entraban con otras intenciones.
En la tienda Dorsay, ubicada en la avenida 20 entre calles 22 y 23, había una gran cola.
La señora Dilcia Terán, manifestó, muy coloquialmente, que estás acciones del Gobierno Nacional son “comida para hoy y hambre para mañana”, pues explicó que los primeros que realizan sus compras son los mismos trabajadores y militares, y las personas que llevan horas en las colas, tienen que esperar y muchas veces comprar lo que está en existencia.
Por su parte, Erika Ramos, sostuvo que desde las 10:00 de la mañana se encontraba haciendo la cola, los ciudadanos entraban de tres en tres, pero luego algunos entraron coleados y se agudizó la situación.
“Nos dijeron que no se podía comprar dos o tres productos iguales y todo el mundo salía con más de cuatro licuadoras y microondas”, mantuvo Ramos muy desilusionada.