Dos momentos históricos relevantes y dos sucesores dispares

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Después de la independencia, Venezuela experimentó diferentes momentos históricos y muchos cambios de gobierno, pero los más importantes fueron el final del gomecisno y la larga agonía a del chavismo.
Aunque relevantes, fueron diferentes y contrapuestos, ambos presidentes, uno dictatorial y el otro elegido en elecciones libres, designaron como sucesores a los hombres de su entera confianza; con la esperanza que continuaran su obra, su sistema de gobierno, sus sueños, que perduraran sus doctrinas en el tiempo y el espacio .
Gómez dejó como sucesor al General Eleazar López Contreras, coterráneo suyo, hecho a su imagen y semejanza, estudioso, educado, compañero de lucha durante la Revolución Restauradora, un militar brillante, honesto y fiel a la causa.
Chávez escoge como sucesor al señor Nicolás Maduro, un oscuro chofer de autobuses, con mucha suerte, habilidoso y medianamente inteligente, de origen desconocido, con partida de nacimiento dudosa, sin ningún comprobante de estudios realizados.
Eleazar Lope Contreras asume provisionalmente la presidencia, en el acto conforma un Gobierno de coalición, integrado por lo mejor del gomecisno y lo mejor da la oposición, concilia con sus antiguos adversarios, legaliza los partidos políticos, enrumba el país hacia la democracia, la paz, el progreso y la convivencia pacífica, creó las bases para hacer de Venezuela un país moderno, le dio un giro al país de 180 grados hacia lo positivo.
Maduro hizo todo lo contrario: radicalizó el enfrentamiento con la oposición, emprendió una feroz persecución contra los sectores democráticos, se ha comportado más sectario y más déspota que el difunto; su gobierno es el más corrupto, anticonstitucional que ha tenido el país en toda su historia democrática, dio un giro de 360 grados hacia lo negativo.
López Contreras promulgó la creación de casi todos los ministerios que hoy existen, modernizó el ejército, la academia militar, ejecutó un plan de gobierno novedoso para la época, fue un gobierno nacionalista y progresista.
Maduro terminó de hipotecar el país a los chinos, a los iraníes y a los cubanos.
López Contreras fue un amante de la paz, la libertad y los derechos humanos.
Maduro posee un temperamento violento y revanchista, ignora el terreno que pisa, psicológicamente anda en las nebulosas.
Definitivamente ambos han marcado un hito en la historia nacional, López abrió el camino hacia el avance tecnológico, educativo, económico, la libertad y la hermandad entre los venezolanos.
Maduro profundizó la división el odio, el hambre, la pobreza, el atraso.

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