Tres días de protestas llevan maestros y profesores en las instalaciones de la Zona Educativa, donde el Colectivo de Lucha de los Trabajadores Nacionales de la Educación mantiene cerradas las instalaciones del recinto a fin de encontrar respuestas a sus solicitudes reivindicativas.
En sus rostros se refleja el cansancio producido por las laboriosas jornadas de protestas, pero, aún así, se mantienen firmes creyendo que sus acciones unitarias guiarán a la pronta solución del conflicto.
Sus peticiones refieren a deudas pendientes con docentes, administrativos y obreros, quienes tienen dos, tres, cuatro y cinco años sin recibir remuneración por su labor; asimismo, desean su inclusión en la nómina laboral del ministerio de Educación con el fin de obtener beneficios de ley.
Aunque establecieron conversaciones con directivos de la Zona Educativa, los trabajadores informaron sentirse excluidos de la mesa de negociación y el proceso de auditoría, lo cual accionó las medidas radicales de los empleados de la educación.
En el estado Lara, existen cerca de 2.500 trabajadores que dicen estar amparados por una resolución firmada por la ex directora de la Zona Educativa, Gisela Cañizales.
Exigen pronunciamiento de la ministra Hanson
Yessica Bullones, vocera del colectivo manifestó que “la única manera de parar las actividades de protesta, es mediante un pronunciamiento oficial de la ministra Maryann Hanson, en el cual se comprometa con establecer fechas de pagos puntuales”.
Asimismo, expresó que el colectivo exige la inclusión de los 2.500 trabajadores en la cuota presupuestaria concerniente al año 2014.
“Necesitamos que se concrete una primera fase de pagos desde este momento hasta el mes de diciembre, en el cual privilegiaremos a las personas con mayor antigüedad. Luego, procederíamos a una segunda tanda de pagos totales hasta el mes de abril”.
Bullones, rechazó las acciones emanadas por parte de directivos de la Zona Educativa, quienes presuntamente amenazan con desincorporarlos de sus labores sin continúan con el conflicto.
“Las amenazas nos hace más fuertes. Queremos recalcar que no abandonamos las instituciones, en ningún momento nos negamos a dar clases, pero ya no aguantamos esta situación económica”.
Agredidos
En tanto, los trabajadores denunciaron que el día jueves en horas de la noche, fueron agredidos con piedras y botellazos; en el hecho, afortunadamente, no se registraron heridos.