Obligada a ganar y necesitada de resultados favorables en otros escenarios, la selección sub17 de Venezuela busca una milagrosa clasificación a la segunda fase del mundial de Emiratos Árabes, al enfrentar a Rusia en su último partido de la primera ronda, en el cierre del grupo D.
El desafío se juega en Fujairah y tiene comienzo fijado para las 8 y 30 de la mañana.
La tarea no es fácil para el elenco de Rafael Dudamel, que necesita ganar y ligar una serie de resultados para atrapar uno de los cuatro boletos disponibles para los terceros lugares. El detalle es que en dos de los seis grupos ya hay equipos con al menos cuatro puntos, por lo que sus opciones son realmente mínimas.
De todos modos, más allá de pensar en la clasificación a los dieciseisavos de final, el representativo nacional quiere hacerse con los tres puntos para al menos dejar el torneo con un resultado positivo. Su rival de turno también llega en iguales condiciones, lo que hace anticipar un desafío abierto, sin demasiada preocupación en el tema defensivo y con más atención en el ataque.
Tanto venezolanos como rusos vienen de perder con Túnez y Japón, dos seleccionados que llegaban al torneo sin mayor ruido y se convirtieron en los primeros clasificados a la próxima etapa.
“Estamos muy concentrados porque sabemos que si ganamos el último partido frente a Rusia, tendremos la posibilidad de pasar a octavos de final como mejores terceros. Entonces esa es nuestra esperanza, estamos para ganar y pasar de ronda”, señaló el mediocampista David Zalzman, el cerebro del Venezuela en la zona de creación y que pertenece al Deportivo Anzoátegui en el fútbol local, pero que tuvo una pasantía por las inferiores del Barcelona.
“Rezamos siempre en el vestuario antes de salir a la cancha, conseguiremos el milagro”, agregó el mediocampista, quien tiene fe en que se darán los resultados que necesitan.
El equipo venezolano, que llegaba con muchas ilusiones pero no ha sido el mismo del Suramericano, tiene problemas en la zona de ataque, al no contar con el lastimado Andrés Ponce y con el desconvocado Ronaldo Peña, lo que ha llevado a Dudamel a la opción de considerar la posibilidad de hacer un ajuste en la alineación abridora, colocando a Andris Herrera en lugar de Nicolás Márquez.
Fue una de las variantes que asomó el director técnico en los entrenamientos previos al desafío, una plan que también incluye la alineación de José Luis Marrufo en lugar de Diego Osío, lo que le daría mayor solvencia a la retaguardia.
En el reciente desafío contra los japonenes, el equipo venezolano fue superado abiertamente, “como nunca había superado” según Dudamel, y completó un partido muy gris en defensa, sin poder controlar a los veloces atacantes asiáticos, que cayeron una y otra vez por el sector izquierdo, la zona donde custodiaba Osío y en la que no llegaban los relevos para ayudar en la marca.
Contra los rusos es necesario eliminar los descuidos y estar atentos a los contragolpes para no correr la misma suerte y así aspirar a más.
