El coach de bateo de Cardenales de Lara, Nelson Prada, está al tanto de que el equipo no ha producido lo esperado en las primeras de cambio. Sin embargo, no entra en desesperación y cree que son pasajes del campeonato que se superan en cualquier momento.
“Tenemos un plan de trabajo amplio desde el inicio de la temporada. Cada pelotero trabaja cerca de cuatro horas antes de cada juego entre la caja de bateo y el BP (batting practice)”, dijo el coach.
El bullpen de la novena larense ha dejado escapar diferencias mínimas en los tramos finales de los encuentros y por allí se perdieron los cuatro primeros compromisos. Pero lo cierto es que la producción ofensiva es una de las más bajas del naciente campeonato.
“En conteos favorables no hemos podido sacar provecho y no se ha conectado la bola con solidez. En eso nos hemos enfocado los últimos días, conversamos con los muchachos y les decimos que deben aprovechar cuando están arriba en la cuenta”, analizó Prada.
Para el técnico, los slump ofensivos de los equipos forman parte del juego. “Todos pasan por esos momentos, a veces al principio, a veces a la mitad y otros al final de la campaña. Lo importante es hacer los ajustes correspondientes para dejarlos atrás”.
A juicio de Prada, no hay que entrar en pánico, debido a que la temporada es joven. “Cada juego cuenta y todos son importantes, pero no hay que entrar en pánico, porque eso solo genera ansiedad”.
“En las últimas cinco temporadas, Cardenales ha liderado la ofensiva en tres oportunidades y en las otras dos hemos estado entres los tres equipos más bateadores”, relató el coach de bateo, quien comparte esa labor con Juan Querecuto.
“Juan los conoce muy bien y realizó un gran trabajo desde que iniciaron los entrenamientos”, recuerda. “No hay presión, porque la mayoría son bateadores experimentados”.
Además, Prada reconoce que hay un plan de trabajo individual para cada bateador y considera que la concentración es clave para salir del mal momento. “Cada bateador tiene que conocer cuál es su rol y partiendo de allí tomar turnos inteligentes”.
Sin embargo, el coach espera que el slump quede en el pasado. “A veces solo basta un buen juego para terminar con el mal momento”, concluyó.