La semana pasada, para asombro de vecinos y transeúntes del populoso sector La Mora, más de 30 árboles fueron talados.
El ecocidio fue perpetrado por quienes dirigen la junta de condominio de la Urbanización La Mora y según declaraciones de los mismos vecinos, “no fue consultada en reunión de propietarios”.
Los vecinos argumentaron que para evitar diferencias con “estas personas, preferimos no revelar nuestros nombres hasta que el Ministerio del Ambiente sancione a estos monstruos que acabaron con más de treinta especies vegetales”.
El asombro y la indignación de los vecinos fue tal, que muchos se detuvieron en las afueras del conjunto residencial a observar petrificados la barbarie.
Uno de los denunciantes introdujo la respectiva denuncia ante la cartera ministerial con competencia dado conoce que la vil acción no fue solicitada.
“Esta barbarie debe ser penada y los responsables deben ir presos porque ni siquiera fue una poda, fue una tala indiscriminada, violando incluso leyes nacionales debidamente delimitadas”, dijeron.
El precio del desastre
Aportaron que los obreros que realizaron la tala dañaron el cerco eléctrico de la urbanización, “porque se hizo violentamente para que los vecinos no nos enteráramos del daño ambiental, pero la cuestión se les escapó de las manos hasta el punto de derribar el cerco de protección”.
Cuánto va a costar -prosiguieron- que estas especies luego de resembrarse crezcan, pues muchos años.
Los propietarios que denunciaron, que sumaban más de seis, subrayaron que no cancelarán un solo bolívar por el daño ambiental y el material causado por personas irresponsables.
“Tendrán que cancelar este daño quienes dieron la orden, pero además no descansaremos hasta que el Ministerio del Ambiente sancione a los responsables. Iremos a los medios si en los próximos días esto no ocurre”, espetaron con indignación.
EL IMPULSO intentó conversar con Rosa Virginia Arrieta, directora del Ministerio del Ambiente-Lara, pero alegaron que estaba indispuesta para atender a los medios de comunicación.