La Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA en inglés) anunció el viernes que presentó cargos formales por dopaje contra el ciclista estadounidense Lance Armstrong, los que de ser comprobados le despojarían de sus siete títulos en el Tour de Francia.
Un panel de revisión de tres miembros evaluó las pruebas reunidas por la USADA y las alegaciones de Armstrong antes de votar por unanimidad para presentar cargos formales ante las denuncias reveladas el pasado 13 de junio.
El siguiente paso en el proceso será una audiencia ante un panel arbitral que se pronunciará sobre el caso. El asunto podría ser llevado al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) para una resolución final.
«Armstrong, que está acusado junto cinco de sus antiguos colaboradores, podrán ventilar su caso en público en una audiencia de arbitraje, en donde todas las pruebas que se presentarán, testimonios de los testigos y de un grupo independiente de árbitros, decidirá el resultado del caso», dijo la USADA en un comunicado.
El organismo aseguró que «seguirá los procedimientos establecidos acordes a las leyes federales estadounidenses, y que fueron aprobados por los atletas, el Comité Olímpico de Estados Unidos y todas las organizaciones deportivas olímpicas».
Según USADA, Armstrong fue parte de una conspiración de dopaje con la ayuda de los entrenadores y otras personas durante muchos años.
La Agencia antidopaje asegura que el texano de 40 años se dopó durante gran parte de su carrera profesional mediante el uso de EPO, transfusiones de sangre, la testosterona y la hormona de crecimiento, y también estimuló a otros ciclistas a doparse.