Capturar la atmósfera de un concierto es una labor bastante exigente, al igual que las expresiones de los músicos que se encuentran en el escenario. El fotógrafo se debate entre distintas situaciones. No interrumpir a los espectadores, contar con una buena iluminación, lograr un momento inédito, así como las emociones, no es una tarea sencilla, en esto coincidieron José Díaz, Saulo Ortiz y José Anka, fotógrafos del Festival Internacional de Jazz de Barquisimeto, quienes realizarán la exposición fotográfica El jazz toma luz y forma el próximo lunes 2 de septiembre en ocasión del festival en su octava edición.
“Es un reconocimiento que la Fundación Festival Internacional de Jazz hace a los fotógrafos del evento con el objeto de incentivarlos y agradecer la labor que desempeñan. Ese reconocimiento al trabajo, a la cobertura de cada una de las actividades del festival es bastante valioso, es un aplauso a la constancia y al empeño que le imprimimos a los momentos dentro y fuera del escenario”, dijo José Díaz, fotógrafo y coordinador de la colectiva fotográfica.
Recordó que en 2011 tuvo lugar la primera exposición de fotografías.
Este año, vuelven al escenario con 12 imágenes a color y en blanco y negro de 30 x 40, alusivas a las ediciones pasadas del festival.
“Se realizó una selección previa, bastante balanceada, ya que cada uno de nosotros y la propia fundación, tiene un gran registro de imágenes de los diferentes conciertos, espectáculos y actividades del Festival Internacional de Jazz. Aunque es una colectiva, cada uno revelará su propuesta, estilo y matiz”.
Por su parte, Saulo Ortiz, fotógrafo de eventos sociales, indicó que comenzó hace cinco años como colaborador del Festival. Actualmente, es al igual que Díaz y Anka, fotógrafo oficial del espectáculo. Destacó que también ha colaborado con la revista Gala y Velada.
“Soy un aficionado al jazz. Un concierto en vivo es distinto, enriquece la creatividad, combinar el arte de la fotografía con el jazz es fabuloso”.
Ortiz, ha realizado exposiciones a escala local, nacional e internacional.
José Anka, otro de los protagonistas de la colectiva, nos dijo que este año celebra seis años como fotógrafo de la Fundación Festival del Jazz. Anka es publicista, fotógrafo publicitario y guitarrista de una banda de rock.
“El festival ha sido como una escuela, anteriormente no escuchaba jazz y ahora tengo bastante conocimiento en la materia. Le he tomado mucho cariño al oficio y a todos los eventos del festival, por ello, esta exposición fotográfica es tan importante”.
José Díaz, además de fotógrafo del festival, se encarga de diseñar cada año la imagen que representará al evento. Aunque la fotografía comenzó como un pasatiempo en su vida, con el tiempo fue consolidándose en el área.
“Como fotógrafos tenemos un papel muy importante, asimismo, la oportunidad de acercarnos a los músicos, lo que nos ha permitido apreciar que los jazzistas son excepcionales, increíbles personas, sin egos de ningún tipo. Al final del festival cada uno recibe un dossier con las fotos de su presentación”.
Es de mencionar que estos tres fotógrafos estarán exponiendo junto al escultor barquisimetano Miguel Hernández.