El antesalista venezolano Miguel Cabrera se mantuvo en el lineup de los Tigres de Detroit, a pesar de lidiar con las dolencias que lo acompañan desde hace varias semanas. En el juego del martes por la noche resintió la lesión en el área abdominal.
El criollo figuraba como antesalista y tercer bate de la alineación inicial que presentó el mánager Jim Leyland para enfrentar a los Mellizos de Minnesota en el Comerica Park.
El estratega de la novena bengalí (Leyland) aseguró que Cabrera sintió dolor al tratar de batear el primer lanzamiento que vio durante el noveno episodio el martes. En ese turno, el maracayero abanicó la brisa y dejó dos corredores en circulación para que Minnesota concretase la victoria con pizarra 6-3.
Según CBS Sports, Leyland dijo que no estaba seguro si la lesión de Cabrera era en la ingle o en el abdomen. El venezolano ha jugado con dolor en la zona abdominal, además de lidiar con una lesión en la cadera y batallar también con un pequeño problema en una de sus piernas.
A pesar de todos los problemas, la producción del aragüeño no ha mermado y se mantiene como firme candidato a repetir como Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, además de mantenerse en carrera para revalidar la Triple Corona.
“Podías ver el dolor en su rostro”, dijo el estratega a la agencia internacional AP. Leyland estudia la posibilidad de utilizar al bateador designado, Víctor Martínez, como tercera base, para colocar como designado a Cabrera algunos días.
“Existe una ligera posibilidad, (el coach) Ronnie Belliard ha hablado con él sobre eso», explicó el mandamás al Michigan Live, según publica el portal Elemergente.com. «Él toma roletazos en la práctica, puede hacerlo, tiene buenas manos. La cosa es que tenga la velocidad de manos”.
“No sé cuál será la situación, tengo que averiguarlo”, finalizó Leyland. Por lo pronto, Cabrera guapea y se mantiene en el terreno de juego, pero el alto mando de Detroit teme que el venezolano pueda agravar la lesión y perderse mucho más tiempo.
Sandoval descansa
El tercera base de los Gigantes de San Francisco, Pablo Sandoval, podría regresar a la alienación este jueves en el duelo frente a los Piratas de Pittsburgh, después que los rayos X que le practicaron salieron negativos.
Sandoval fue retirado del lineup de los Gigantes el martes a última hora, al sentir dolencias en la espalda. El miércoles tampoco vio acción en la derrota de su equipo frente a los Medias Rojas de Boston.
Según el reporte del periodista Alex Pavlovic, se espera que el carabobeño retorne a la acción este mismo jueves. En los compromisos previos, Joaquín Arias fue el encargado de sustituir al criollo en la antesala.
Carrasco luce
El lanzador derecho Carlos Carrasco consiguió su primera victoria de la temporada al completar un relevo de dos entradas en el maratónico juego contra los Angelinos de Los Angeles que se definió en 14 entradas. El barquisimetano lanzó dos entradas en blanco, con un hit, un boleto y un ponche.
Tras una terrible actuación como abridor, el barquisimetano cumplió un relevo solvente, antes que los Indios fabricaran tres carreras en el inning 14. Durante ese compromiso, Asdrúbal Cabrera realizó par de jugadas claves para que persistiera el empate.
Con un out en la pizarra en el octavo inning y corredores en primera y segunda, Cabrera sorprendió en la intermedia a Josh Hamilton. La jugada tomó mayor relevancia porque el bateador Kole Calhoun siguió con sencillo a la derecha que pudio darle el triunfo a los Angelinos.
“Observé a Hamilton que tomó mucho terreno en segunda”, recordó Cabrera sobre la jugada. “Así que noté que teníamos chance de hacer el out. (El pitcher) Joe Smith hizo un buen tiro a segunda”.
En el noveno, con dos outs y corredor en posición anotadora, Erick Aybar pegó rodado fuerte por el medio del campo que parecía internarse en el jardín central, pero el campocorto criollo se lanzó un clavado para decapitar el batazo y robarle el imparable ganador al dominicano con un certero disparo a la inicial.
“Sabía que tenía que tomar la bola”, dijo Cabrera sobre la magistral jugada. “Si la bola pasaba, hubiésemos perdido el juego”.
