Estados Unidos aseguró este lunes que no solicitó al Reino Unido la retención del brasileño David Miranda, pareja del periodista que reveló en el diario The Guardian diversos documentos secretos obtenidos por el exanalista informático estadounidense Edward Snowden, aunque sabía de la operación.
Miranda, pareja del periodista y abogado estadounidense Glenn Greenwald, fue detenido el domingo durante nueve horas en el aeropuerto londinense de Heathrow, en virtud de una ley antiterrorista, argumentó la policía británica.
Los artículos de Greenwald en The Guardian han sido el principal vehículo de divulgación de los documentos obtenidos por Snowden, un exconsultor de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense.
Al ser interrogado sobre este asunto, el portavoz adjunto de la Casa Blanca, Josh Earnest, reconoció este lunes que Washington había sido informado por las autoridades británicas del interés que tenían en Miranda.
«Hubo un aviso del gobierno británico, por lo que es algo de lo que teníamos un indicio de que podía ocurrir», afirmó Earnest a los reporteros en rueda de prensa habitual.
«Pero no es algo que nosotros solicitásemos y fue llevado a cabo específicamente por las autoridades en cumplimiento de la ley británica», añadió.
Por su parte, la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, confirmó que Washington había sido «informado de antemano» pero aclaró que «no solicitamos a las autoridades del Reino Unido ejecutar esa operación».
Preguntada inmediatamente por periodistas si Estados Unidos había sugerido la acción a Londres o si la aprobaba, Psaki omitió cualquier respuesta concreta.
Miranda fue detenido e interrogado cuando hacía escala en el aeropuerto de Heathrow en su vuelo procedente de Berlín con destino a Rio de Janeiro, donde vive con Greenwald.
La Policía confiscó los equipos electrónicos pertenecientes a Miranda, como su teléfono móvil, sus dispositivos USB, DVDs y videojuegos, afirmó el propio Miranda a los reporteros en Brasil el lunes.
«Hubo seis agentes diferentes, yendo y viniendo, hablándome. Me hicieron preguntas sobre toda mi vida, sobre todo, y se llevaron mi ordenador, mis juegos, mis tarjetas de memoria, todo», señaló.
¿Tiene Estados Unidos en su poder la laptop y el celular de Miranda? «No tengo más información», eludió Psaki.
Intimidación con efectos
Greenwald ha acusado a las autoridades británicas de tratar de intimidarle por informar sobre los programas de inteligencia occidentales y ha prometido nuevas revelaciones sobre el aparato de espionaje londinense.
«Esto fue obviamente diseñado para enviar un mensaje de intimidación a los que trabajamos periodísticamente en informar sobre la NSA y su equivalente británico, el GCHQ (Government Communications Headquarters)», escribió Greenwald en el diario The Guardian.
«Si los gobiernos estadounidense y británico piensan que esta estrategia nos disuadirá de continuar cubriendo de manera agresiva lo que los documentos revelan, se equivocan. Esto tendrá el efecto contrario: nos anima a ir más lejos», advirtió el periodista.
Miranda, de 28 años, ayuda a Greenwald en su trabajo, según afirmó el diario The Guardian. No es empleado del periódico pero se le pagan sus vuelos. Estuvo en Berlín con Laura Poitras, una cineasta estadounidense que ha trabajado con Greenwald en los documentos revelados por Snowden.
La Policía detuvo a Miranda en base a una polémica ley antiterrorista que permite a las autoridades retener a un sospechoso durante nueva horas sin tener que demostrar ninguna prueba.
«No es justificable»
Un portavoz del primer ministro británico se limitó en señalar que «la policía decide cuando es necesario y apropiado utilizar» la legislación antiterrorista.
Por su parte, el canciller brasileño, Antonio Patriota, consideró este lunes que la detención «no es justificable» y anunció que conversará con su par británico sobre el tema.
Greenwald analizó y publicó los documentos suministrados por Snowden, que ponen de manifiesto los programas masivos de espionaje de las comunicaciones electrónicas llevadas a cabo por la NSA.
Acusado de espionaje por Estados Unidos, Snowden se ha refugiado en Rusia, donde el gobierno le ha otorgado un asilo provisional.