El presidente paraguayo Horacio Cartes dijo el viernes que quiere mantener relaciones con Venezuela y desea su ingreso al Mercosur, «pero existe un problema jurídico que debe ser resuelto».
Las relaciones entre ambos países están suspendidas desde julio de 2012.
«Durante la media hora de almuerzo que mantuve el jueves con Dilma Rousseff de Brasil y Cristina Fernández de Argentina, como ellas tienen más experiencia que yo, les pedí que me ayudaran a encontrarle una salida legal a la situación de Venezuela en el Mercosur», dijo Cartes en conferencia de prensa en el auditorio del Banco Central.
Recordó que «existen puntos mínimos jurídicos en discusión: unos creen que Venezuela entró legalmente a Mercosur porque Paraguay estuvo suspendido; otros creen que se debe respetar el protocolo que establece unanimidad de los miembros para la incorporación de cualquier otro país al bloque», cuyos fundadores son Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
El congreso paraguayo no ha podido aprobar la entrada del país caribeño desde 2006. Paraguay fue suspendido del Mercosur tras la impugnación del entonces presidente Fernando Lugo. Posteriormente los gobernantes de Argentina, Brasil y Uruguay aprovecharon la ausencia de Paraguay para aprobar el ingreso de Venezuela.
«Los cancilleres de todos los países miembros se comprometieron e encontrar una solución jurídica lo antes posible», acotó Cartes.
El magnate tabacalero dijo por otra parte que está dispuesto a vender sus fábricas de cigarrillos.
«Si alguien paga, se lleva mi fábrica de cigarrillos», dijo.
El gobernante negó cualquier responsabilidad suya en el presunto contrabando hacia el Brasil, especificando que «es un problema cambiario: hoy Paraguay está lleno de productos argentinos porque la tasa de cambio de divisas nos favorece; cuando la tasa es favorable para los brasileños, se llevan los productos paraguayos».
Además de cigarrillos, el nuevo mandatario posee una fábrica de refrescos con filial en Florida, Estados Unidos; varias haciendas, fincas productoras de tabaco, compañía de publicidad y representaciones de productos extranjeros.
Cartes, de 57 años y miembro del derechista Partido Colorado, asumió el mando el jueves para gobernar hasta 2018.
Reiteró que «daremos el marco necesario para que lleguen al país empresas deseosas de invertir para a través de ellas crear fuentes de empleo y comenzar a vencer la pobreza con trabajo. Paraguay es un país de oportunidades».
Advirtió que «esas inversiones deben hacerse en un clima de comodidad. Por tanto, vamos a respetar la propiedad privada. Y para conocer la realidad de la tierra, haremos un catastro de propiedades».
En otro momento de la reunión con periodistas, confirmó que Brasil solicitó la aprobación de José Eduardo Martins Filicio como nuevo embajador y agregó: «estamos abiertos a todo el mundo; actualmente, solo no se puede sobrevivir, debemos trabajar juntos en todos los aspectos».