Pese a los reiterados llamados que han hecho los vecinos, tanto en los medios de comunicación como de manera formal ante las instancias municipales, la basura sigue colmando los depósitos y desbordando las aceras y calles en distintos sectores de Palavecino, generando malestar y en algunas ocasiones, interrumpiendo el libre tránsito.
Cabe recordar que los malos olores que desprenden los desechos, son causantes de múltiples afecciones respiratorias. Además, las acumulaciones de basura atraen roedores e insectos portadores de enfermedades.
En algunas esquinas de la jurisdicción, se ven las bolsas de desperdicios regadas por las aceras. Las paradas de transporte público y las entradas de los conjuntos privados, también se encuentran abarrotadas de basura, desbordada de contenedores y pipas que ya no dan más.
La contaminación poco a poco se hace un elemento común en el paisaje palavecinense, y los olores nauseabundos parte de la cotidianidad, con la que deben aprender a convivir los ciudadanos.
Promesas incumplidas
Hace poco más de un mes, el presidente del Instituto Autónomo de los servicios públicos del Municipio Palavecino (Iaspmupal), Tabay Lucena, anunció que realizarían un operativo especial de recolección de basura, en coordinación con la Corporación de Desarrollo Jacinto Lara (Corpolara).
Por su parte, el actual candidato a la Alcaldía de Palavecino, coronel Victor Delgado, informó en su carácter de gerente de Corpolara, que se contratarían camiones por parte de esa instancia para apoyar a la municipalidad en la tarea de sanear las tres parroquias de la jurisdicción.
Ofrecieron librar a la ciudad de desechos sólidos en un lapso de 20 días, a través del trabajo mancomunado entre Iaspmupal y Corpolara.
Sin embargo, al recorrer las calles de las distintas comunidades, se evidencia que las ofertas emanadas desde los entes oficiales no fueron cumplidas. Mientras tanto, los palavecinenses siguen esperando por soluciones a la problemática, que tiende a agudizarse con el paso de los días.
En La Mora no aguantan más
Atendiendo múltiples llamados de la comunidad de La Mora a nuestra redacción, el equipo reporteril de EL IMPULSO se trasladó hasta el lugar, pudiendo verificarse que efectivamente, los desechos sólidos se siguen acumulando en las aceras y frente a los conjuntos residenciales.
No obstante, también se pudieron observar cuadrillas de la Alcaldía de Palavecino, adscritas al Iaspmupal, realizando labores de desmalezamiento y retirando ramas caídas de los árboles.
Universidad afectada
“La comunidad tiene muchas necesidades, pero fundamentalmente, necesitamos que nos recojan la basura. En una oportunidad, el camión del aseo se demoró como un mes sin pasar”, comentó Ana Isabel Ayala, residente de la comunidad y propietaria de un establecimiento de comida rápida en las inmediaciones de la Universidad Yacambú.
Por su parte Arturo Yánez, estudiante de la referida casa de estudios superiores, indicó que la acumulación de desechos sólidos afecta la salud de quienes hacen vida en la institución, por cuanto los olores llegan incluso hasta las aulas de clase.
“Los lotes de basura duran entre una semana y quince días en los alrededores de la universidad. Los mosquitos y el olor nos molestan también cuando estamos comiendo”, señaló.
Piden seguridad en los alrededores de la UNY
Además del problema de la acumulación de desechos sólidos, los habitantes de la comunidad de La Mora, así como también los estudiantes de la Universidad Yacambú, deben soportar el flagelo de la inseguridad personal.
Diariamente se registran atracos en el sector, donde la soledad y la escasa presencia policial favorecen la acción delictiva. Esto además genera que el servicio de transporte público hacia el sector sea esporádico, pues son pocos los conductores que se aventuran a hacer recorridos allí.
“A veces tenemos que esperar dentro de la universidad, porque es normal que pasen motorizados amenazando a los transeúntes”, comentó Arturo Yánez.
Manifestó que también es común que asalten a los pasajeros en las unidades de transporte público, sobre todo en las busetas. Agregó que los arrebatones en las paradas se producen casi a diario.
Atribuyó la inseguridad del sector al poco patrullaje, y en horas de la noche al deficiente alumbrado público.
Por su parte, Ana Isabel Ayala destacó la necesidad de reactivar el módulo policial ubicado en la entrada de la urbanización. “Es muy importante que volvamos a tener agentes en La Mora, porque la delincuencia es insoportable”, subrayó.
Manifestó que en una oportunidad, un antisocial se hizo pasar por cliente en acudió a su negocio de comida rápida. Tras solicitar un desayuno el delincuente “hizo una llamada, e inmediatamente apareció un motorizado acá. Entre los dos atracaron a todos los que estaban comiendo y se llevaron aproximadamente cinco celulares”, relató.
Solicitó a los distintos cuerpos de seguridad, que incrementen la frecuencia de los recorridos en La Mora. “No nos importa si es Policía de Lara, Policía Nacional, Guardia Nacional o Plan Patria Segura. Lo único que queremos es más efectivos en la zona, para poder estar un poco más tranquilos”, expresó.
