Indepabis: ¿Con qué se come eso?

El instituto para la defensa de las personas en el acceso a los bienes y servicios, Indepabis, es un ente adscrito al ministerio del poder popular para el comercio, creado con la función especifica de defender y proteger los derechos e intereses individuales y colectivos, estableciendo los ilícitos administrativos, procedimientos y sanciones, así como delitos y su penalización.
Igualmente regular su aplicación por parte del poder público con la participación activa y protagónica de las comunidades a través de los comités de contraloría social para el abastecimiento, con el objeto fundamental de resguardar la paz social, la justicia, el derecho a la vida y la salud del pueblo Venezolano.
Pero en tan exquisito maquillaje se filtra la pregunta: ¿Cumple lo establecido en cada una de sus partes? Hasta ahora ha sido algo más de lo mismo. Un elefante blanco, la metáfora de algo inusual, vistoso, deslumbrante, pero a la vez inútil y perjudicial.
¿Con qué se come eso? Una frase de toque irónico para preguntar por algo que se desconoce.
Ilustramos esta famosa pregunta utilizada por Luis Miquilena aquel mayo del 2000, cuando siendo uno de los máximos defensores de la revolución de Hugo Chávez, le nombraron la sociedad civil a raíz del reclamo de 2 organizaciones para suspender las mega elecciones del 28 de ese mes.
El problema es que Indepabis no se come con nada porque todas las irregularidades que están afectando al pueblo para el organismo no existen, no las atienden y permiten que los especuladores actúen libremente ante las narices de ellos.
¿Qué pasó con el problema de la carne?
El presidente de esta entidad, Eduardo Samán, dijo que el tema del precio del producto es un asunto que se “desbordó” por descuido de la institución, y que en adelante “operarían en el país con una imagen sería relanzada, siguiendo la orden presidencial de depurarlo en su lucha contra el acaparamiento y la corrupción, y que trabajarán por mantener los precios justos”.
Señaló que el costo regulado del kilo de la carne de primera era de 27 bolívares, el de segunda 18, y que debía cuidarse su venta en redes privadas y públicas.
Pero la coyuntura que se generó en el sector cárnico a consecuencia de la regulación, obligó al Ejecutivo a llegar a un acuerdo para que los comerciantes puedan vender el rubro a un precio que les permita seguir operando.
Es decir, mientras tanto, para que pueda fluir el abastecimiento, el Ejecutivo permitirá que las carnicerías vendan al precio real del mercado, «sin excederse».
Hubo un acuerdo verbal para que vendan el kilo hasta en 90 bolívares, los cortes de segunda en 75 y los de tercera en 40, valores que están muy por encima de los actuales codificados.
El Ejecutivo pidió cautela con los cortes parrilleros (solomo de cuerito, punta trasera y lomito) que no están regulados. En esos casos no podrán exceder de Bs 120 por kilo.
En vista de esto, el Indepabis bajó el tono a las fiscalizaciones para aliviar la tensión en el sector comercial, y mantener el abastecimiento del rubro mientras se definen los nuevos precios que serán publicados en gaceta oficial. ¿Pero cundo? Como siempre será un paño de agua tibia para el desgaste del consumidor y se siga pagando la carne a estos altos pecios.
Esa es la tónica del gobierno. Armar bullicios para que el pueblo note su presencia, y luego bajar la guardia y que las dificultades sigan durmiendo su sueño eterno.
INDEPABIS reconoce además que en el caso de la venta de productos de primera necesidad por parte de vendedores informales, “hay mafias donde están involucrados mayoristas que desvían camiones completos”. ¿Quien o quienes más estarán detrás de todo esto?
Las ventas informales no son de baja proporción y basta pasearse por cualquier sector de la ciudad para ver el papel higiénico como arroz, exhibido en las calles a 40 bolívares el paquete de 4 rollos, actitud que continúa dañando al país. Todos lo ven, menos INDEPABIS. ¿A quien o a quienes protegen?
¿Se recuerdan del Indecu? Vieja ley de protección al consumidor y al usuario, otro elefante blanco, ahora Indepabis, dizque para permitir un único procedimiento y ampliar el ámbito de aplicación de la ley, porque «el concepto de consumidor cambió al de persona, la cual puede ser natural o jurídica».
¿Con qué se come eso?