Por años los Baños de Guape era uno de los pocos sitios de recreación de los que disponía la familia larense, no sólo los residentes en Duaca sino también de Barquisimeto y otras poblaciones de la región centroccidental.
Lamentablemente, aparentemente, por razones políticas, el agradable parque al norte de la capital del municipio Crespo fue dejado sin el necesario mantenimiento, entregado a grupos inadecuados, hasta llegar un momento en el que constiuía un riesgo visitarlo.
De sitio de reunión familiar los fines de semana se tranformó en guarida de antisociales que lo convirtieron en sitio preferido para el consumo de estupefacientes o prácticas de brujerías.
Luego de algunas campañas llevadas a cabo por residentes en la otrora Perla del Norte, la alcaldía del municipio Crespo decidió recuperarlo, contando para ello con aportes del Fondo de Compensación Interministerial y el Consejo Federal de Gobierno.
De acuerdo a la valla colocada en la entrada, en la primera etapa se invirtieron 1.959.300, 85 bolívares y aquel lugar abandonado que hasta daba temor visitar, hoy está recuperando su ambiente agradable de antaño.
La alcaldesa Elizabeth Manzanilla de Valecillos se propuso recuperar los Baños de Guape para la familia, no sólo duaqueña sino larense en general y prácticamente ya se ha logrado, como lo puede constatar cualquiera que le viusite.
La piscina para adultos está terminada, con su correspondientes toboganes, igual que la destinada a los niños, así como la fuente de soda y la mayoría de las caminerías.
“Sólo le falta el agua para que en pocos días podamos volver a bañarnos en estas piscinas como lo hacíamos antes”, dijo una mujer cincuentona que acudió a constatar los avances de la recuperación.
Apenas falta concretar algunos espacios, entre ellos los pequeños arroyos que aún cruzan el bosque, para que la alcaldeza Manzanilla de Valecillos anuncie la fecha de la reinauguración.
Se tiene previsto que ambas piscinas sean abastecidas de agua desde los manantiales existentes en el lugar, los cuales han sobrevivido a pesar de la deforestación ejecutada por personas inescrupulosas aprovechando la nula vigilancia por parte de la Guardia Nacional Forestal.
También es necesario acondicionar la vía de acceso desde el sector Cacho e’ Venado para que las familias puedan ingresar en sus vehículos con toda comodidad.
Igualmente quedaría pendiente la vereda que permitirá a las personas residentes en
Duaca ingresar al parque desde la nueva hostería.
Lamentablemente durante la remodelación fue eliminada la gruta donde los católicos acudían a venerar una imagen de la Virgen María.
Una vez que entre en servicio ese centro de reunión familiar, se espera la dotación de vigilancia policial o de cualquier organismo que pueda garantizar la seguridad a los visitantes e impedir que elementos indeseables le invadan como ocurrió anteriormente.
