De 314 reclusos 91 son mayores de edad que no deberían estar en este recinto sino en cárceles penitenciarias
Luego de que la ministra Iris Varela solicitara una inspección al Centro Socioeducativo Pablo Herrera Campins, de El Manzano, el gobernador Henri Falcón, acudió al retén, en compañía de representantes del Saina Lara, Seguridad y Orden Público y directores pertenecientes a su tren ejecutivo, a fin de constatar la realidad de este recinto y buscar soluciones a las necesidades de los jóvenes que allí se encuentran recluidos.
“Nosotros hemos venido tal y como lo habíamos previsto, también le propusimos a la ministra que nos acompañara para que viera de primera mano la situación que se vive en este centro de reclusión de menores. No vamos a entrar en el juego perverso del toma y dame, sino tomar acciones y demostrar que hemos trabajado por rescatar las instalaciones de este recinto, con acciones coordinadas”, indicó Falcón.
Además de ello destacó que en el 2010 se consolidó un reglamento interno de este centro, a fin de mejorar las condiciones de los recluidos, en este caso de los menores de edad, y que en muchos casos se encuentran hacinados por la gran cantidad de reclusos y jóvenes que cumplieron su mayoría de edad y aún se encuentran sin traslado.
Hacinamiento en el retén
Cabe destacar que el artículo 641 de la Lopna establece que los adolescentes que cumplan 18 años serán trasladados a una institución de adultos en las cuales estarán físicamente separados.
“Cuando los muchachos cumplen su mayoría de edad por mandato de la ley deben se trasladados, caso similar al que se vive en las penitenciarías del estado Lara, que se han convertido en cárceles improvisadas ante el impedimento del Gobierno de que traslademos a sus respectivos centros penitenciarios. Son sitios construidos para albergar a un máximo de 100 personas y actualmente tenemos más de 800 reclusos, representando un riesgo de fuga, alteración de orden público y anarquía”.
Expresó que han acudido a diferentes instancias del Poder Judicial y no han conseguido soluciones ante este hecho.
“No es competencia de los gobiernos regionales, más allá de la reclusión de los menores de edad en los centros socieducativos. En este recinto se han realizado diversas inversiones para reforzar la seguridad y mantener bien a los muchachos”.
Por otra parte, Falcón indicó que si bien el Centro Socioeducativo no es una “tacita de oro”, se han mantenido activados para rehabilitar los espacios y trabajar en pro de la mejora de la institución.
“Se trata de manejar esto con altura y nivel, no sólo hacer señalamientos sino poner manos a la obra, trabajar en conjunto gobierno regional y nacional, por el beneficio de los reclusos y del pueblo larense en general”.
Rutina diaria
Los jóvenes recluidos en este centro mantienen una agenda de actividades que los mantienen en constante aprendizaje. Entre ellos cuentan con una escuela de primer a sexto grados para la enseñanza de aquellos muchachos que no habían tenido la oportunidad de asistir a una escuela. Allí aprenden a escribir y leer y reciben las enseñanzas que encontrarían dentro de un aula de clases.
De igual forma, dentro del retén se realizan talleres formativos de panadería, manualidades, ebanistería y carpintería, así como también se fomenta la práctica deportiva. Muchos de estos jóvenes tienen beneficios por su buen comportamiento y se destacan en equipos de fútbol y beisbol, fuera del centro, con permisos especiales para acudir a las respectivas prácticas.
Maryelis Sánchez de Tamayo, directora del Saina Lara, destacó que los menores cumplen un diario vivir, con talleres programados.
Los adolescentes se encuentran clasificados según sus delitos, edades y categorías. Los adultos están separados de los menores, así como también los de ejecución, juicio y control disponen de sus áreas específicas. También de acuerdo al delito que los jóvenes cometan se mantienen en salas especiales.
85 en rebeldía
Actualmente el Centro Socieducativo Pablo Herrera Campins cuenta con una matrícula de 314 adolescentes, de los cuales 91 son mayores de edad, que deberían ser trasladados a centros penitenciarios como la Cárcel de Uribana, sin embargo algunos cuentan con beneficios por su buen comportamiento dentro del retén, por lo cual se les permite completar su sentencia en este recinto.
Lastimosamente no es la mayoría de los jóvenes. La directora del Saina Lara indicó que en los últimos meses varios muchachos se han dedicado a destruir el retén, romper los comedores y construir armas blancas caseras.
“Muchos cumplen su mayoría de edad dentro den centro y si mantienen una buena conducta, apegada a la normativa interna, pueden permanecer aquí. Tienen que ser ejemplo para el resto de la población, si no deben ser trasladados a los centros penitenciarios”.
Indicó que de los 91 adolescentes mayores de edad, un total de 85 se mantienen en conducta de rebeldía.
Han solicitado traslados y ninguno se ha ejecutado.
Compromisos adquiridos
Durante el recorrido los jóvenes solicitaron al Gobernador diversas reparaciones y enseres que contribuyan al desarrollo de las actividades que se realizan en este centro de reclusión.
Entre ellos destacan la solicitud de una nueva mesa de pin pong, neveras para el área de panadería, materiales y herramientas para el taller de ebanistería, así como también la modernización de las canchas con colocación de grama sintética y nuevas arquerías de futbolito, uno de los deportes que más se practica dentro de los espacios de este recinto.
Los compromisos adquiridos fueron anunciados para el próximo miércoles, cuando se comenzarán los trabajos de remodelación de las áreas deportivas y se instalarán los enseres ofrecidos, por parte de los representantes de las diferentes instituciones dependientes de la Gobernación de Lara.
Además, la directiva de Fundela entregó un kit de balones, kit de boxeo y nuevos tableros de ajedrez para incentivar a los muchachos del centro con actividades sanas y recreativas que los alejen del ocio.