El núcleo económico de la ciudad pasó de ser un lugar tradicional donde se realizan compras y diligencias, a un espacio concentrado de situaciones agresivas y violentas que perturban la calidad de vida del ciudadano común.
Pese a los múltiples esfuerzos realizados por organismos de seguridad urbana, todavía se resaltan focos de violencia en el centro de la ciudad, donde constantes denuncias llegan por robos a mano armadas, asaltos a bancos, saqueos y hurtos sorpresivos de los denominados “rateros”.
En consecuencia, el ciudadano ha cambiado su actitud al transitar por esta zona, mostrándose de bajo perfil en una multitud agitada por realizar sus diligencias en el mínimo tiempo posible.
En horas de la noche, los consultados por este rotativo manifestaron que el miedo se acrecienta por la oscuridad que reina en la zona y el cese de actividades por la gran mayoría de negocios. Sin embargo, alegan que siempre están de la mano con el Supremo para llegar a salvo a sus hogares.
Los larenses coinciden en que la causa principal de las situaciones de violencia es la escasa inversión en educación, lo cual genera que el ser humano conozca sus derechos y promueva el respeto hacia sus semejantes.
Asimismo, adjudican responsabilidades al Gobierno Nacional, por no garantizar espacios adecuados que promuevan el desarrollo académico del joven.
Comercios en jaque
Por otro lado, los comercios desde temprano abren sus puertas con la firme intención de conseguir ganancias en el día, no obstante, diversos acciones delictivas en su contra amenazan la encomiable labor diaria que emprenden por el crecimiento de la nación.
Aunque el centro de la ciudad es proyectado como un espacio viable para la realización de intercambios económicos por su ubicación geográfica, los dueños de comercios a diario se quejan porque el Estado no logra garantizar su seguridad.
A partir de las cinco de la tarde, el resonar del descenso de santamarías indica el caer de la tarde y la bienvenida a la noche, donde los ciudadanos consideran, que otro estilo de vida invade los espacios de las ciudad.
