La refinería Isla, operada por Petróleos de Venezuela (PDVSA) en Curazao, recobró el suministro eléctrico que había perdido por un apagón el fin de semana y planifica iniciar el miércoles el protocolo de arranque de la instalación, dijeron el martes a Reuters trabajadores de la planta de 335.000 barriles por día de capacidad.
Isla, que en los últimos años ha operado parcialmente por frecuentes problemas en la provisión de agua, luz y vapor que hace el gobierno curazoleño, es un importante enclave de la estatal PDVSA para exportar crudo y derivados a Asia, su segundo mercado más importante.
El reinicio de la planta ocurrirá el mismo día en que PDVSA planea arrancar el flexicoquer de la mayor refinería en Venezuela, Amuay, luego de que una explosión menor e incendio lo afectaran la semana pasada mientras se encontraba fuera de servicio por una falla.
La inoperatividad en simultáneo del flexicoquer de 72.000 barriles por día (bpd), de unidades menores de la refinería Cardón y de Isla resta unos 400.000 bpd al volumen habitual de producción de derivados de PDVSA, que desde el 2012 está importando combustibles para atender el mercado doméstico y sus compromisos de exportación.