Luego de 23 días en huelga de hambre en la sede de la Nunciatura Apostólica en Caracas, el estudiante de la Universidad de Los Andes, Vilca Fernández, aseguró que aunque sigue en pie de lucha, se encuentra estudiando la posibilidad de abandonar la protesta.
En este sentido, indicó que el Nuncio Apostólico, monseñor, Pietro Parolin, le ha solicitado en varias oportunidades que acabe con la huelga de hambre, debido a que la Iglesia católica nunca ha estado de acuerdo con las protestas que puedan en poner en peligro la vida.
«Aquí en Caracas ya son 23 días, pero nos preocupa aún más los compañeros que se encuentran en Mérida que ya tienen 35 días sin ingerir ningún tipo de alimentos y el gobierno nacional no ha hecho nada. Quiero agradecer el gesto que ha tenido la iglesia católica de querer ser mediadora y la preocupación que ha manifestado por el conflicto universitario», indicó.
Reiteró que las únicas personas que tienen la potestad de finalizar con la huelga de hambre del movimiento estudiantil, son el presidente de la República, Nicolás Maduro y el ministro de Educación Universitaria, Pedro Calzadilla.
«La culminación del conflicto está en manos del gobierno. Lo que necesitamos es que el ministro Calzadilla de una vez por todas deje de jugar con la vida de los estudiantes, de los universitarios y se siente con un dialogo fraterno con el sector estudiantil y con Fapuv», indicó.
Afirmó que el diálogo sincero y honesto es el único camino para resolver los problemas en el ámbito universitario, por lo tanto el estudiante no entiende la actitud del gobierno nacional que pretende desconocer a los profesores y a los estudiantes.
«Lo hemos manifestado en miles de oportunidades y se lo hemos dicho a su excelencia el Nuncio que no está en nuestras manos suspender la huelga, sin embargo, como lo dijimos anteriormente lo estamos estudiando y esperemos que en esta reunión de los rectores con el ministro, el gobierno se ponga la mano en el corazón y deje de jugar con la vida de los estudiantes», dijo.
Finalmente explicó que según los exámenes médicos que le han realizado los médicos de la Cruz Roja Venezolana, actualmente tiene problemas «con la tensión y con el funcionamiento de los riñones, por eso estamos estudiando acabar con la huelga de hambre, pero reiteramos que el ministro también debe iniciar el diálogo con nosotros».
