Habitantes de Sarare salieron a protestar la mañana de ayer por los constantes hechos de violencia que ocurren en la localidad. A las 11:00 de la mañana, cuando la protesta estaba en pleno, dos hombres en una moto, acuchillaron en el brazo derecho a Norelbis Giménez para quitarle 8 mil bolívares cuando salía del Banco Provincial.
“Esto no se aguanta; acaban de atracar a mi compañera de trabajo cuando salía del banco, con una plata que debía pagar”, comentó una de las lugareñas indignadas.
La protesta inició a las 8:00 de la mañana. Conductores de rapiditos, mototaxistas y ciudadanos en general se concentraron frente a la Plaza Bolívar para repudiar los hechos. Atravesaron sus vehículos por la calles que rodean la plaza y exigieron a gritos seguridad.
El hecho que generó el descontento de los habitantes fue un tiroteo que se produjo el lunes. Se prolongó por varios minutos, abarcó varios sectores del pueblo y terminó con un joven de 15 años herido.
Encapuchados siembran terror
Luis Barra, presidente de la Cooperativa de Mototaxis San Fermín, comentó que el lunes en la mañana llegó una banda de ocho motorizados encapuchados, con armas automáticas y comenzaron a disparar. “Se formó un tiroteo, todo el mundo tuvo que correr y meterse a las casas, dispararon por varios sectores, comenzó en Guajirita y llegó a la plaza. Dejaron un adolescente herido”.
Esa misma tarde los residentes acordaron que saldrían a protestar al día siguiente. “Los atracos son todos los días a los mototaxistas, conductores de rapiditos, transportistas de líneas extraurbanas y a los ciudadanos en general”, comentó José Rojas, mototaxista de la zona.
Rojas refirió que los fines de semana el pueblo se torna más violento porque siempre hay tiroteos. “Los fines semana siempre se forman tiroteos que dejan por lo menos un muerto. No tenemos resguardo policial, estamos desamparados”.
El joven mototaxista dice que nunca ha sido víctima del hampa, pero hace poco atracaron a su esposa y le quitaron el teléfono. Dos hombres apuntaron a su hija de tres años para que la madre no se resistiera a entregarlo. La niña estuvo varios segundos apuntada por los hombres mientras la madre desesperada gritaba que no le hicieran nada, que agarraran el teléfono y se fueran; que dejaran a la niña. “Esto ha sido muy duro. A mi hija le cuesta dormir porque siempre está pensando en ese momento. Algunas veces cuando logra conciliar el sueño se despierta sobresaltada porque sueña con el momento”.
En horas del mediodía llegó al lugar la concejala oficialista Virginia Villalobos e invitó a los manifestantes a la sede del concejo municipal para escuchar sus planteamientos. Luego de una hora en asamblea acordaron que se levantaría la protesta y la edil se comprometería a tramitar con representantes del Gobierno nacional una solución.“Hablé con el general Octavio Chacón, jefe del Comando Regional Cuatro, para ver qué posibilidad existe de traer el Plan Patria Segura y dijo que se iba a analizar la posibilidad. La concejala aseguró que Sarare era una localidad tranquila, pero los cuerpos de policía de la entidad no patrullan la zona.