Las autoridades salvadoreñas decretaron el martes la emergencia sanitaria nacional debido al incremento de los casos de dengue que podrían derivar en una epidemia y anunciaron que lanzarán de inmediato campañas masivas para erradicar el mosquito transmisor de la enfermedad.
«Es una emergencia nacional estratificada de la siguiente manera: alerta naranja para 18 municipios (de 262 que tiene el país), alerta amarilla para 140 municipios y alerta verde para 104 municipios», anunció en conferencia de prensa el director de Protección Civil, Jorge Meléndez.
Agregó el «alerta naranja en estos 18 municipios significa que estamos en una situación inminente que se transforme en una epidemia grave por lo cual hay que tomar medidas urgentes y contundentes».
Con la alerta naranja (la tercera de cuatro etapas de emergencia) implica que las comisiones municipales y departamentales deben de tomar medidas de precaución y atender de inmediato a la población en las zonas más criticas.
Con la alerta amarilla, se active el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional para la coordinación en todo el país para ayudar y auxiliar a la población.
En la primera de las etapas (verde), se alerta a la población en zonas de alto riesgo y se activan los sistemas de emergencia en todo el país.
El Ministerio de Salud Pública informó que en lo que va del año se han reportado 9.164 casos sospechosos de dengue, se han confirmado 2.343 casos positivos y hubo un muerto por la enfermedad, una niña de 10 meses.
La capital salvadoreña y sus alrededores están entre los lugares con más casos de dengue. Meléndez explicó que en los 18 municipios, incluida la capital del país, donde se decretó alerta naranja, el 80% de las personas afectadas por dengue son niños y jóvenes en edad escolar, por lo que se considera que los centros escolares son el principal lugar donde se adquiere en mal.
Detalló que para combatir la enfermedad, todos los lunes realizarán labores de eliminación de criaderos de zancudo en las escuelas, entre otras medidas de prevención.
Además se realizarán dos jornadas nacionales de combate al dengue con la colaboración de las autoridades municipales y nacionales y continuarán con las fumigaciones masivas en todo el país. Las autoridades instaron a la población a no descuidar las medidas de saneamiento para evitar la reproducción del mosquito transmisor del mal, que se manifiesta en los enfermos con diarrea, deshidratación y fiebre, principalmente.
Según las autoridades, el mayor Índice larvario se encuentra en el departamento de San Salvador, donde se han registrado por lo menos tres de las cuatro cepas de dengue que circulan en el ambiente.
«Sólo eliminar la larva y el zancudo no funciona, el trabajo tiene que ser integral y deben de participar todas las instituciones de los municipios que tienen alerta», advirtió Meléndez que llamó a todos los salvadoreños a unirse al combate contra el dengue.
Las autoridades dijeron que mantendrán un monitoreo diario de los casos de dengue para evitar tragedias como la registrada en el año 2000 cuando la enfermedad causó más de 25 muertos, en su mayoría niños, entre 3.000 casos confirmados.