Desde tempranas horas de la mañana de este lunes, familiares de los privados de libertad del centro penitenciario David Viloria, conocido como Uribana, trancaron el acceso vial de la carrera 17 con calles 24 y 25, adyacentes al Edificio Nacional, sede de los tribunales larenses.
Con pancartas en mano gritaban consignas exigiendo la presencia de la fiscal 13 del Ministerio Público junto a un médico forense para verificar la supuesta golpiza de la cual fueron víctimas los 121 reos del anexo masculino, antiguo espacio para las féminas, y los 180 del sector conocido como El Rodeíto.
En conversación telefónica con uno de los privados de libertad, quien no quiso revelar su nombre, informó que seis custodios del Ministerio del Servicio Penitenciario, quienes están de guardia hasta mañana miércoles, junto a la subdirectora de la cárcel, iniciaron desde el viernes, represalias contra ellos buscando droga.
“Aquí no han pasado nada; es casi imposible porque revisan a nuestros familiares por completo. Recientemente hicieron una requisa y no encontraron nada, por eso nos tapaban la cabeza con una bolsa y talco, nos obligaban a “cantar” pero no tenemos droga dentro del penal.
Después nos pegaron con un palo envuelto con telas para que no quedaran marcas y usaron guantes. Le dijimos a “La Drupy”, (como le llaman al subdirectora por supuestamente estar en todas partes) que llamaríamos a los fiscales y dijo que no le importaba nada ni nadie”.
Supuestamente en la primera requisa consiguieron un chip de teléfono por eso comenzaron a golpearlos. “Nosotros queremos reinsertarnos a la sociedad, cumplir tranquilamente nuestra condena. Pedimos respeto, también somos seres humanos”, aseveró.
Mientras tanto, la protesta continuaba y las mujeres se quejaban, pues dicen las revisan tanto al entrar como al salir del penal. “¿Cómo es posible que el sábado nos desnudaron y un custodio nos vio? Ahora nos montan en un banco de sentarse, nos paran, nos ponen a pujar, nos abren y hasta nos meten espéculos en la vagina”, comentó Mariana Pantoja.
Según el relato de los allegados, fueron amenazados que si declaraban ante los medios de comunicación, les iba a ir peor.
Pidieron la destitución del coordinador de custodia de apellido Escalante, pues a juicio de las damas, es él quien dice a cuál de los reos golpearán. “Los esposan y cuelgan de unos tubos. Después los ponen a hacer educación física como si estuvieran en el Ejército”.
«Seré vocero ante las autoridades»
El presidente del Circuito Judicial Penal del estado Lara, César Reyes, salió a recibir a quienes protestaban y aunque aseguró que no era su competencia directa, se comprometió con los presentes en recibir una carta donde manifiesten el por qué de su descontento y hacérselo saber a la ministra Iris Varela. “Nosotros no tenemos competencia en esa materia, resolvemos los problemas inherentes al Palacio de Justicia pero seré vocero ante las autoridades”, aseveró.
De igual manera Reyes informó que a partir de ayer, inició las audiencias en la calle, todas las mañanas durante una hora. “Vamos a asesorar a la gente en la calle; estaremos cara a cara con el pueblo en aras que todos puedan denunciar y manifestar las inconformidades para resolver los problemas”. Dijo querer una justicia expedita y transparente. Con respecto al retardo procesal penal, recordó que los jueces no estarán encerrados sino que trabajarán en conjunto con las comunidades e irán hasta las cárceles como parte de la labor. “De esa manera nos permitirá conocer las necesidades del pueblo. Estamos en proceso de reordenamiento de la justicia”.