El venezolano Johan Santana lanzó el primer no-hitter en la historia de los Mets de Nueva York, ayudado por una jugada del árbitro de tercera base y una captura excepcional en el jardín izquierdo en la victoria 8-0 sobre el San Cardenales de San Luis.
Tras una serie de sustos en su 51 temporada de historia, Santana, finalmente terminó el trabajo en el juego de los Mets, 8.020 días desde que el equipo nació en la 1962.
«Increíble», dijo Santana. «Al llegar a esta temporada Sólo tenía la esperanza de volver y estar saludable y ayudar a este equipo, y ahora estoy en esta situación en la ciudad más grande para el béisbol», declaró el criollo.
Phil Humber lanzó un juego perfecto para los Medias Blancas de Chicago en Seattle el 21 de abril, y Jered Weaver de los Angelinos de Los Ángeles dejó sin hit de Minnesota el 2 de mayo
«Fue una noche loca, mi bola rápida estuvo en movimiento por todo el lugar», dijo Santana. «Fue duro porque me sucedió tan rápido. Yo no era capaz de ver nada», dijo Santana. «El árbitro hizo su sentencia y ese fue el final de la misma», dijo sobre el batazo de Carlos Beltrán que estuvo en la raya.
Santana cruzó desde allí hasta la séptima entrada, cuando Molina bateó una línea con un out al jardín izquierdo. Entonces Baxter corrió a atrapar la bola en el Citi Field, una atrapada fenomenal antes de estrellarse de lleno en la valla. Baxter fue sacado de juego por una fuerte contusión.
«Cuando lo vi corriendo de vuelta a la franja de advertencia e hizo una jugada increíble. Un juego sobresaliente y salvó el juego», dijo Santana. «A todos estos chicos, quiero darles las gracias por lo que hemos logrado».
Sin duda un gran partido, el gocho está de vuelta.
El Kid cerrador
Un setup o un preparador del último inning, como el capitalino Francisco «Kid» Rodríguez, puede tranquilamente ser cerrador oficial de cualquier organización en las Grandes Ligas, como la de los Cerveceros de Milwaukee donde se encuentra.
Eso lo sabe el manager Ron Roenicke y ante esa circunstancia no descarta por completo de dejar a un lado a su taponero habitual, John Axford, en algún momento. Si llega a cuatro partidos seguidos, como lo hizo, no tendría ningún temor en reemplazarlo por el venezolano.
El piloto reconoce que El Kid es un cerrador nato, aunque solo tiene un rescate este año, pero acumula 292 en su carrera y se encuentra en camino de unirse al club de los 300, donde solo se hallan 23.
Roenicke dice que esa proeza significaría muchísimo para el criollo. Rodríguez lo admite. «En realidad sería algo glorioso para mí», señaló. «Estaría muy agradecido si me dan la opción de hacerlo y conseguir alcanzar algo tan especial en las Grandes Ligas».
Sin embargo, las oportunidades para el nativo son muy pocas. Ya no es utilizado con frecuencia en el rol de cerrador. «Pero mantengo una actitud humilde. Debo sentirme muy bien por lo que tengo y he podido hacer».
El venezolano expresa que si le preguntan de querer ser taponero, inmediamente respondería: «Por supuesto. El trabajo que hago en estos momentos lo considero pasajero. Pero tengo que asegurarme de cumplir cuando se presente la gran oportunidad», indica y añadió que no la perderá por ningún motivo.
CarGo impresiona
El despertar del marabino Carlos «CarGo» González, con los Rockies de Colorado, no es cuento, luego de volver a sacar la bola del parque y su equipo apabullar 11-5 a los Astros de Houston.
El zuliano, que viene de conectar jonrones en cada uno de sus últimos tres turnos, dio otro laberíntico batazo de cuatro esquinas en el primer inning e impulsó tres carreras ante envíos de Bud Norris. De paso recibió base por bolas intencional en el segundo, largó doble en el segundo y disparó imparable en el octavo.
Ese reciente cuadrangular es el 14 en la temporada y lo convierte en el primer jugador de los Rockies en disparar cuatro en cuatro apariciones consecutivas. Es, además, la 22da ocasión en que un pelotero de Grandes Ligas consigue un vuelacerca en cuatro salidas sucesivas al plato y la 38va en que alguno lo alcance en cuatro turnos oficiales.
Suma, en estos momentos, de 20-13, aparte de lograr seis jonrones y 10 empujadas en los últimos cinco encuentros. «Yo no juego por réocords. Los récords simplemente suceden», dijo. «Estoy feliz de ser parte de un récord, pero al mismo tiempo no pienso en eso. El único récord que sigo es el del equipo».
Foto: Reuters/Archivo
