El medallista olímpico de esgrima Rubén Limardo acaba de llegar a Venezuela y se encuentra complacido de la labor cumplida en los Grand Prix internacionales y, de paso, dijo que se prepara intensamente para buscar las mejores actuaciones en el Panamericano de Cartagena en Colombia y el mundial de Budapest en Hungría. El primero se realiza del 15 al 21 de junio y el segundo del 5 al 12 de agosto.
“Me siento feliz porque el 2013 ha sido un buen año para mí”, señaló. “También me alegro porque la esgrima venezolana ofrece resultados satisfactorios, lo que es importante porque es la única manera de que todos estén pendientes de las presentaciones nuestras en el exterior. La de Silvio Fernández y mi persona”.
Expresó que en ocasiones ha sentido presión por ser el actual campeón olímpico. “Pero me he dedicado a trabajar fuerte y mejorar la técnica, especialmente cuando acudo a los Grand Prix de París en Francia. Ahí asisten los más destacados del mundo y la concentración es mucho mayor, para evitar dar ventajas en las primeras de cambio”.
Recordó que durante su entrenamiento en Polonia ha cambiado su estrategia, a fin de poder llegar a los combates psicológicamente bien preparado y dispuesto a asegurar los puntos en las rondas iniciales. “Eso me permitió lograr el nacional de Polonia y más adelante el mundial de Argentina, en virtud de que no ofrezco márgenes e impido que los rivales tengan posibilidades de sobresalir”.
Expresó que igualmente se trabaja para fortalecer el equipo que comienza a coger fuerza, encabezado por Fernández y él. “El propósito es tratar de mantenernos bien unidos e intentar de completar parte del ciclo que nos permita clasificar a los Juegos de Río de Janeiro 2016. Nuestro entrenador José Velásquez está pendiente de los detalles y considera que se han dado los pasos necesarios para cubrir las expectativas mundialistas”.
Su pimer lugar individual en el mundial de Argentina y el tercero por equipo tuvo una gran acogida en el Ministerio del Deporte, ahora dirigido por la esgrimista Alejandra Benítez. “Ella sabe lo que implica estar en una competencia de alto rendimiento. Está consciente porque como atleta ha vivido esos momentos”.
