«Todo comienza en el Kilómetro Cero, porque cada texto tiene un kilómetro cero, un punto de partida… el del asombro. Invito a las personas a leer mi libro, y si en el arranque del viaje no les gusta lo que leen, pueden abandonarlo, o quizás, se van a encontrar con páginas que se parecen a lo que han vivido en este país», expresó el escritor Leonardo Padrón sobre su nueva obra literaria Kilómetro Cero, que fue bautizada el día martes en la ciudad capital.
Al encuentro asistieron importantes personalidades, no sólo del mundo artístico nacional, sino también del escenario político del país como Ismael García. Entre los artistas estuvieron Mimí Lazo, Luis Fernández, Daniela Bascopé, Claudia La Gatta, Claudio Nazoa, Yordano, Guillermo García, Caridad Canelón, entre otros, y su compañera sentimental, la actriz y cantante Mariaca Semprún.
Padrón bautizó el ejemplar junto a la Editorial Planeta y el responsable del prólogo, el escritor Alberto Barrera Tyszka. Son 20 crónicas vividas por su autor, las cuales quiso plasmar en un libro, y no dejarlas solo en su mente o en su columna Todo en Prosa.
– ¿Qué nos cuenta Kilómetro Cero?
– Es un libro de crónicas, un género que cultivo muchísimo como lector, y desde hace muchos años lo ejerzo como escritor, pero últimamente lo he estudiado más a fondo, porque creo que es una maravillosa trinchera de escritura para descifrar un continente, y un país, tan complejo y lleno de matices como lo es Latinoamérica y Venezuela respectivamente. Son crónicas de viajes, íntimas y de la historia del país.
– ¿Cómo hizo la selección?
– En estos momentos estoy escribiendo puntualmente, cada 15 días para El Nacional, donde tengo una columna de crónica que se llama Todo en Prosa. En este libro hay muchas de esas historias, una muy famosa que es el Furor, sobre el momento en que acompañé a Capriles en su viaje por el occidente del país. Hay otras, una de ellas es cómo los venezolanos pasan la navidad en Miami, entre otras.
– ¿Cómo definiría la crónica?
– Es apasionante, tiene cultores inmensamente respetables. En Venezuela podemos hablar de gente como Elisa Lerner y José Ignacio Cabrujas, entre otros. Es un coctel de realidad y literatura.
– ¿La realidad supera la ficción?
– ¡Claro! Para escribir mis crónicas quincenales me baso en la realidad. Sales a la calle y la tienes ahí. Más bien tengo que luchar con el idioma para no traspasar los caracteres que tengo como espacio en la prensa, porque son muchos los cuentos que te ofrece la realidad diariamente.
– ¿Cuál es su crónica preferida?
– Bueno… le tengo mucho cariño a El Furor, porque generó una resonancia impresionante. Hay otra que se llama Ruta 66: la cárcel, que fue un episodio que me pasó en una cárcel de California, es muy divertida.