El pasado domingo, tras un fuerte aguacero, se inundó parte del campo del Estadio de La Piedad Norte, infraestructura en remodelación desde hace más de diez meses por parte de la Alcaldía de Palavecino y cuya entrega se había programado a los tres meses de iniciarse la obra.
Toda una serie de vicisitudes han empañado la refacción de este espacio deportivo, desde el monto de la obra hasta las características que tendría al final.
Freddy Ladino, entrenador de futbol menor en el estadio La Piedad, destacó que la infraestructura no ha sido formalmente entregada a la comunidad “ni tampoco sabemos cuándo sucederá”.
-El propio alcalde Richard Coroba prometió en varios programas de televisión que el estadio sería multimodal: de fútbol y béisbol, y tendría grama sintética, pero a más de diez meses nada de esto ha ocurrido.
El deportista acotó que otra de las irregularidades en la reconstrucción del estadio, son las luces, que después de 30 minutos de encendidas se apagan.
El estadio sí tiene dolientes
Por su parte, Macey Agüero, dirigente social de La Piedad, indicó que el estadio “lo dejaron en situación de desastre, espacio que tradicionalmente, a pesar de las limitaciones, funcionaba con toda normalidad para un universo enorme de deportistas, propios y foráneos”.
-La intervención de los drenajes es gravísima, porque los vecinos se inundarán cuando la laguna del campo alcance gran nivel y el agua se reboce con fuerza, amplió.
Los multifuerzas instalados desaparecieron y la acera interna que redujo las dimensiones del campo, jamás fue consultada.
Hizo un llamado de atención a los consejos comunales del sector para que actúen como contralores sociales.