Este sábado se cumplen ocho años del asesinato de Juan Pablo Pernalete, joven venezolano de 20 años que perdió la vida durante una manifestación pacífica en Altamira, Caracas, en 2017. A pesar del tiempo transcurrido, su familia y organizaciones de derechos humanos siguen exigiendo justicia.
Un joven ejemplar truncado por la violencia
Juan Pablo Pernalete era un estudiante universitario y atleta de alta competencia, ganador de una beca deportiva en una reconocida universidad del país. Además, era proteccionista de animales y promovía actividades deportivas en comunidades populares.
Juan Pablo dedicaba parte de su tiempo a enseñar baloncesto a niños de sectores vulnerables, combinando su amor por el deporte con su compromiso social.
Asesinado durante una manifestación pacífica
El 26 de abril de 2017, durante una protesta contra el gobierno de Nicolás Maduro, Juan Pablo recibió un disparo de gas lacrimógeno directamente al pecho por parte de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), lo que le causó la muerte.
La ONG Provea recuerda que los responsables directos, aunque identificados, no han sido llevados a juicio, perpetuando un clima de impunidad.
Sin avances en la búsqueda de justicia
A ocho años de su muerte, la familia de Juan Pablo y organizaciones defensoras de derechos humanos denuncian que no ha habido avances significativos en el proceso judicial. «Todo sigue igual, sin justicia y en completa impunidad», afirmó Provea en un comunicado.