Juro que volveré un día como hoy, cuando me mate la nostalgia y la necesidad de verlo.
Caminar por calles desoladas, caminar sin rumbo fijo, tratando de encontrar las huellas de aquél hogar perdido.
Con el recuerdo a cuestas de una cunita vacía… el banquito junto a la enredadera, y aquellas manitas blancas dibujando sueños en primavera.
Una pared tupida de hiedra con dos farolitos blancos y una pequeña fuente con un ángel de cemento.
Esos recuerdos míos, colgados en mi mente anciana, son una neblina que se va desvaneciendo lentamente en el desván de mi inconsciente.
Nostalgia y silencio en cada rincón, en cada esquina de mi alma, como sombras que se desvanecen con la calma, el silencio me envuelve en su manto de paz, y en medio de la oscuridad encuentro mi verdad.
Caminando…caminando con la frente erguida y, con la esperanza de encontrarlo algún día…
Y… llegó abril, y en un día cualquiera… un día, de esos pasajeros Yo, lo vi. Si, lo vi… detrás de una vidriera…
Lo vi alegre, era mitad de mañana, estaba sentado al lado de una chica de cabellos negros.
Sin que me viera lo observé. Él sonreía, parecías feliz. Llevaba puesta una franela… no pude apreciar bien su rostro a través de la húmeda vidriera.
En un instante, me di cuenta que la humedad no estaba en la vidriera, sino en la mirada mía… Lloraba… si, lloraba de alegría porque ¡¡Te había encontrado de nuevo, mitad del alma mía!!
Y… lo vi, estaba feliz, aunque sin mi, pero feliz.
Un chico guapo… inmenso. No, como con el niñito, de mis recuerdos. Frágil e indefenso, ¡Y, al que yo, protegía hasta del mismísimo viento!
Respiré profundo, cerré los ojos, y pensé en voz alta:
—Ven, ven más a menudo “ÑAÑA»… Si, ven, cada vez que lo quieras ver… ¡ya sabes dónde encontrarlo!
Y… me descubrí vestida con retazos de nostalgia y de silencio, se mezclaron los recuerdos en un eterno vuelo, y perdida en la inmensidad de la noche, encontré consuelo en la serena madrugada. Descansé en mi casa ¡en la misma casa donde lo he esperado siempre!
Y… a ese lugar juro que volveré de nuevo, un día como hoy, cuando me mate la nostalgia y la necesidad de verlo.
(26 abril de 2019)
Natividad Castillo P. (Natty)
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