La preparación de dulces típicos venezolanos continúa siendo una tradición vigente en la ciudad de Barquisimeto durante la Semana Santa, con cada una de las familias que se esfuerzan por ello, quienes han sostenido esta costumbre durante tres generaciones.
Según relató Elizabeth Briceño Delgado, la tradición comenzó hace 84 años, cuando su abuelo inició con la preparación de estos dulces que prevalecen en el tiempo. “Él empezó con dulces caseros que le traían algunas señoras del sector y poco a poco fue ampliando”, explicó.
Durante la Semana Santa, los productos más preparados por las familias son el majarete, el arroz con leche, el dulce de lechosa y los buñuelos. Estos dulces forman parte del menú tradicional que acompaña la abstinencia de carne roja en este período religioso. “De todos, el majarete es el más solicitado por los clientes”, señaló Briceño.
De todas partes vienen a disfrutar de los dulces
Los ingredientes base del majarete incluyen maicena, coco, leche y especias, y su preparación sigue respetando la receta original familiar. A pesar del paso del tiempo y los cambios en el país, la producción se mantiene activa y con pedidos constantes durante toda la temporada.
Además del reconocimiento local, los productos han adquirido renombre fuera de Lara. “Muchas personas que viven en otros estados o incluso fuera del país hacen encargos a través de familiares. Hay quienes regresan buscando ‘el dulce que compraban de niños’, lo cual habla de la permanencia de esta tradición”, comentó.
La familia Delgado continúa operando el negocio desde su sede original, y en cada Semana Santa se preparan para atender la alta demanda que genera la fecha. “Ya tengo encargos desde hace días”, afirmó Briceño, destacando que la preferencia por los dulces tradicionales sigue siendo alta.